jueves, 17 de marzo de 2011

Entre el Amor y el Odio




Sumario:
Ella se encontró con el futuro de su clan en sus manos. Siendo una niña apenas, tuvo que comportarse como mujer y ganarse el respeto de los hombres poderosos, en un mundo donde la mujer era moneda de cambio. Pero tenía unas cuantas cosas bajo la manga para conseguirlo.

Él sabía su obligación pero entre ejecutarla y aceptarla había un gran espacio. Y en ese espacio se clavo ella. Una mujer que no era más que una niña y que además en sí se comportaba como niño. Con toda su vida complicada cometió errores que le llevaron a perder mucho.

Solo una cosa simple y sencilla podrá devolverle todo lo que quiere él en su vida.

Una cosa sencilla y simple llamada amor.

¿Serán suficientes sus intentos?

Nota de la autora: este fic contiene escenas explicitas de violencia, sexo y lenguaje que podría herir la sensibilidad de las personas, se recomienda discreción y una mente abierta.


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7.- Entre del deber y el placer


Bella pov

-estaré de regreso antes del 24 de este mes, debo revisar los pueblos vecinos y asegurarme que no falte nada, además mi padre está preparando una reunión en Gonder Dell para planear las acciones que se tomaran para atrapar a los Masen- dijo esa mañana.

Una semana después de nuestra escapada a la cabaña.


-promete que regresaras pronto- pedí abrazándolo.

Si él no estaba me sentiría muy sola. En mi castillo no me habría importado, pero en este aun no me sentía en confianza. Aunque las mujeres de ahí me aceptaban como su señora. La mayoría era de la edad de mi madre. No había jóvenes para platicar o para compartir. Me sentía fuera de lugar.

-regresare pronto. No te pongas triste, te voy a extrañar mucho Bella. Puedes pedirle a Bree que te consiga más mujeres jóvenes si te hacen falta, si sales a pasear llévate a los guardias. No salgas de noche. Y piensa en mí- dijo antes de besarme y salir.

Me quede pensando en sus peticiones. No parecían difíciles de seguir. Básicamente debía permanecer entre el castillo. Por seguridad. Aprovecharía ese tiempo, ahora que todo el castillo era nuestro debía aprender mucho más.

-Bree acompáñame a la cocina y por favor reúne a todas las mujeres que trabajan en las torres y pídeles que vengan al salón principal. En cuanto les avises únete también- pedí mientras entraba al despacho de mi esposo para conseguir papel, pluma y tinta.

-señora ¿nos mando a llamar?- pregunto la más anciana de todas.


-así es Greta, como saben Lady Cullen se ha ido al castillo de Gonder Dell dejando este a mi cuidado y aunque me han educado para esto, soy consciente que necesito ayuda. En Eorlingan mi hermana se ocupaba del castillo cuando mis padres no estaban y yo de otras cosas. Así que les pido me ayuden a hacer una lista de las actividades que se hacen aquí para que pueda trabajar en ellas- pedí

Las mujeres se miraron entre ellas y después de unos segundos todas empezaron a hablar al mismo tiempo. Después de un grito para llamar su atención el silencio fue total.
-una a la vez por favor- pedí mientras apuntaba a Greta.

-pues justo ahora ya están en proceso las matanzas de los animales, lady Esme lo dejo listo. Las provisiones están en camino también, eso se revisa desde el mes de noviembre. La despensa se revisa cada mes y será usted quien prepare la lista que se manda al pueblo, puede revisar usted misma la despensa si así lo desea. La señora lo hacía- dijo la mujer.

-también puede escoger los menús para todo el mes y en base a eso surtir la despensa, yo conozco los platillos favoritos del joven Edward, puedo ayudarle en eso señora, además puedo preparar lo que sea que usted me pida. Cada año la señora Esme me manda a otros sitios para aprender los platillos de otras regiones. Puedo cocinar comida china, tailandesa, italiana, española, francesa… usted solo pida- dijo Rhona la cocinera.

-en cuanto a la ropa de cama y cortinas de todo el castillo nosotros podemos apoyarla, la ropa se saca una vez cada seis meses y se cambia toda, se guarda la que está en uso y así se conserva mejor. Ahora estamos con la ropa de invierno, en Febrero se saca la de primavera pero igual el informaremos cuando sea tiempo- dijo Leah.

-en cuanto a los muebles la señora Esme los cambiaba cada diez años, dejando lo que sacaba para la gente del pueblo, remodela una habitación cada tiempo y en si lo que cambia son los colchones o las almohadas, a veces la ropa también. Pero esto queda a su mando ahora- dijo Fiona la mujer que se encargaba de coordinar la limpieza de las habitaciones.

-bueno no parece ser mucho pero sospecho que aun me falta por escuchar- dije cuando otra se adelanto dos pasos.

-la señora Esme revisaba personalmente el guardarropa de los jóvenes y del Señor, ahora que solo está el joven Edward creo que le será mucho mas fácil encargarse de eso- repitió Leah.

-si supongo que sí. Más tarde me gustaría que subieras para ver ese asunto de una vez- pedí.

- El señor Carlisle se ocupaba del armamento de los soldado pero supongo eso lo hará el joven Edward, pero si él no está me temo que eso tendrá que esperar, a menos que usted lo haga- dijo Greta.

-bueno, eso me gusta un poco mas… gracias por todo. En cuanto haya pasado la hora de la comida revisare la despensa y después la ropa- dije mientras terminaba la reunión y se retiraban.

Las cosas no podían ser tan difíciles. Al parecer las mujeres sabían sus deberes y no sería necesario que estuviera detrás de ellas todo el tiempo.

Pase el resto del día entre conservas y listas, revisiones de ropa, cortinas y sabanas. Para cuando llego la hora de la cena estaba muerta de cansancio. Me dormí pensando en mis nuevas obligaciones.

Soñé con Edward. Mi esposo era maravilloso y me sentía un poco ilusionada con él, lo extrañaba cuando no estaba cerca, me agradaba estar en su cama, sus besos, sus caricias, sus manos sobre, dentro y encima de mi cuerpo. Su peso sobre mí. Su calor envolviéndome, amándome, haciéndome pedirle más de eso que solo él sabía darme.

¿Eso era amor?

También soñé con Jake, solo que esta vez el sueño fue diferente. Lo supe en cuanto desperté. Esta vez me estaba despidiendo de él. Mi corazón empezaba a ser propiedad exclusiva de mi esposo.

-avisa a los hombres que saldré a montar- dije a Bree.

-señora, ¿saldrá sola?- pregunto Bree.

-sí, lo hare, anda apresúrate, no soporto un minuto más aquí encerrada- dije

Había prometido no salir de noche, así que en realidad no rompía ninguna promesa, era de día. De mañana para ser precisa.

Una hora después rodeada a una distancia prudente por los hombres, de los que no me pude librar y que aun no sé cómo se enteraron de mi salida, decidí que solo montar era aburrido.
-a quien me gane en una carrera hasta los límites del bosque le daré un jamón entero el sábado que viene- dije cuando se acercaron.

-pero señora…- intento decía algo uno de ellos, me tocaría amenazarlos…

-si yo gano… no tomaran cerveza por una semana- dije sabiendo que sin importar guardias de que castillo fueran, todo podían perder menos la cerveza con la comida, dándole a la carrera la emoción que quería.

-ya saboreo el Jamón- dijo uno de ellos.

Pobres incautos.

Corrí hasta dejarlos atrás, muy atrás. Cuando fui consciente de eso… estaba perdida.
Decid esperar. Me senté bajo la sombra de un árbol, envuelta en la capa que gracias a Greta había llevado, estaba segura ella les dijo a los guardias, esa mujer era una santa. No estaba segura de poder regresar sola. Pasaron dos horas. ¿Por qué tardaban tanto? No pude dejarlos tan atrás como para perder mi rastro.

La panza me rugía de hambre. A mi derecha había unos arbustos con bayas verdes. No serían como las de mi casa, que eran moradas y deliciosas, pero con hambre todo era bueno.

Tome una y la probé, era dulce, muy dulce, sin pensar tome varias más y las metí en mi boca con rapidez. Apenas había tragado esas y cortado otras, cuando un dolor insoportable me atravesó.

Todo se hizo negro.

Edward pov

-señor estamos muy cerca del castillo. ¿Quiere que me adelante para avisar de su llegada?- pregunto uno de mis guardias a pocas leguas de donde mis padres estaban viviendo ahora.

-no, quiero que se vayan directamente a las barracas, yo iré después- ordene.

Quería ver qué Victoria estuviera bien y estar con ella un rato antes de presentarme en el castillo o ya no tendría oportunidad.

-Edward… viniste a verme…- dijo apenas abrió la puerta.
Por suerte me había escuchado cuando le dije donde quedarse. Esa casa era mía. Aunque nunca se usaba. No antes de ella.

-te dije que vendría en cuanto pudiera, estaré unos días y no podía quedarme sin verte. Vamos desnúdate que no tengo tanto tiempo- dije mientras la besaba.

Y la tome como siempre. Y no sentí lo mismo de siempre. La satisfacción física era la misma, pero su cuerpo, su calor, sus gemidos no me ponían loco. Me gustaba eso sí, pero parecía faltar algo. Parecía falta la dulzura de Bella… Bella. Eso era lo diferente.

El remordimiento de engañarla no me dejaba disfrutar de Victoria y lo que me daba. Bueno, ya lidiaría con eso después. Ahora mismo quería verla llegar y estallar dentro de ella como siempre. Y lo hizo. Y de nuevo me falto ese algo. Casi imperceptible, casi nada pero que marcaba la diferencia. Y la diferencia era enorme.

-¿Qué pasa? Estas ido. No te gustó… ¿quieres hacerlo de otra manera?- pregunto antes de subirse en mi.

Nunca lo había hecho así, no con ella.

-no es eso, estoy cansado del viaje- dije deteniéndola.

Eso era algo que solo con Bella compartía y aunque sonara estúpido e hipócrita quería respetar eso. Además que Victoria fuera hermosa no significaba que me haría sentir lo mismo que mi esposa.

-déjame hacerlo, te va a gustar… es algo que nunca hemos hecho…- dijo intentándolo de nuevo.
-Victoria no es necesario que…- me interrumpió con un beso mientras se sentaba sobre mí.
Se movió rápido y me excito su cuerpo pero… no fue lo mismo. No hubo esa locura por llegar, no tuve las ganas de morir como con mi esposa. No quería compararla pero era completamente diferente. Por fin llegamos al clímax. Se dejo caer sobre mí y sentí su peso y calor completamente diferentes. Como si nunca antes lo hubiera sentido.

-Debo irme. No sé si pueda verte de nuevo pero si no… tratare de venir a principios de año- dije mientras me vestía.

-¿Cuánto más me tendrás lejos?- pregunto triste.

-no vas a regresar a River Dell, no mientras mi esposa viva ahí. Nos mudaremos pronto a las tierras de los Swan y quizá allá nos quedemos, así que podrás regresar para ese tiempo y te visitare cuando pueda- dije antes de salir.

-Edward ¿me das un beso?- pregunto antes que cerrara la puerta.

Entre de nuevo y la bese apenas.

-cuídate, te veré cuando pueda- dije sin mirar atrás.

Monte mi caballo y me dirigí al castillo.

-pensé que mandarla lejos era signo de que tomarías en serio a tu esposa- dijo mi mama apenas cruce la puerta.

-mama ya te dije que no te metas en esto-

¿Cómo supo?

-bien, no opinare nada más, solo espero que en el pueblo sean tan discretos como tú, ¿has pensado que alguien puede decirle a tu esposa sobre tu amante?- dijo antes de darse la vuelta.
Carajo, no pensé en eso, aunque nadie se atrevería.

Después de la cena nos reunimos mi padre, Emmet, Eleazar y Jasper. Las noticias no eran muy buenas. Entre los presentes estaban Sam y Jake, Laurent, James y Garrett.

-pensé que traerías a Bella, ella conoce mejor que nadie sus tierras. Su opinión habría sido invaluable- dijo Eleazar.

-no dijeron nada sobre traerla. Pero si es necesaria puedo mandar por ella- dije suplicando que no fuera así, esperaba ver a Victoria antes de irme.

-no, nos arreglaremos sin ella, la verdad mientras antes terminemos antes me regreso a casa, no quiero dejar a Alice sola, ha estado un poco más animada desde hace un par de meses y no quiero que se ponga mal de nuevo- dijo Jasper con cara de imbécil.

Estaba enamorándose rápido al parecer.

-vaya vaya, quien viera al rompecorazones Jasper suspirando por su mujercita- dijo Emmet mientras nos reíamos.

-calladito cuñado, que ya te vi acariciando la prenda de mi hermana- dijo el rubio.
Mi hermano se puso serio.

-bueno terminemos con esto de una vez- dijo Emmet mirándonos.


-los reportes indican que en Vulterra no están, pero aun no sabemos donde se esconden- dijo Laurent.

-mi gente ha estado patrullando las cosas de las tierras que tengo, por ahí no han salido o entrado, donde sea que están no es mi territorio el punto de entrada- dijo Garrett.

-ni el mío- dijo James.

-pues por mi territorio no es, tengo apostados hombres en cada posible punto, cada uno de ellos son fieles, no dejarían pasara nada- dijo Laurent.

-si no los encontramos no podemos hacer nada- dije-

-bien, pasemos a los planes de acción- dijo mi padre.

Tras dos días de organización y elaborados planes por fin estaba libre para seguir mi camino. Como al inicio mande a mis hombres por delante y después de despedirme de todos fui directamente a donde mi amante estaba. Pase la noche con ella. No hubo platicas ni planes, solo sexo. Parte de la noche la tome. La otra parte me la pase en blanco mientras ella dormía. Pensando en mí esposa. En lo que pasaría sí se enteraba.

Pero… ¿Cómo podría enterarse?

De mil maneras.

Recorrí los pueblos a velocidad rayo, solo nos quedábamos para dormir y comer. En diez días estuve de nuevo en brazos de victoria, antes de partir con mi esposa. Pase la noche con ella de nuevo. Para cuando el sol salió monte mi caballo y partí a mi casa, a mi esposa, a mi deber. Llegue al anochecer.

-señor qué bueno que regreso. Su esposa está enferma- dijo Greta apenas cruce la puerta.
-¿Cómo que enferma? Me fui quince días. ¿Qué paso en mi ausencia?- pregunte mientras la mujer corría detrás de mí.

-la señora se ocupo de todo, la despensa, fue a hablar con los matarifes, la revisión de ropa y todo lo que su mama hacía a lo largo del año su esposa lo hizo en doce días. Pero ayer en la mañana insistió en salir a pasear. Al parecer los guardias la perdieron por un rato, cuando la encontraron estaba inconsciente. Los muchachos encontraron Bayas verdes en sus manos. Nadie le dijo que son venenosas. El hierbero del pueblo ya la reviso pero aun no despierta- dijo la mujer mientras llegaba hasta la puerta.

Mande buscar a su hermana. Bueno en sí ya estaban de camino pues le quise dar la sorpresa a mi esposa de que tanto Rose con Alice estuvieran para noche buena. Mis padres se quedarían con Eleazar y su esposa.

Malditos arbustos de bayas verdes. Los deje porque a Victoria le gustaban las flores. Era la única región donde se daban.

Me quede a su lado.

No despertó ese día.

Ni el siguiente…

O el que le siguió a ese…


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buenos días chicas, aquí les dejo el capi de hoy, por favor disfruten.

y recuerden votar y comentar... sobre todo comentar.

con Amor Alejandra Rivas

11 comentarios:

Anónimo dijo...

guauuuu!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!1 soy la primera.
ese eduward ya me harto, cada vez que le es infiel a bella me dan ganas de golperarlo. pero que se podria esperar hombre tenia que ser jajajajajjajja.
estuvo muy bueno el cap. espero con ansias el proximo capitulo.

ROCIO dijo...

EDWARD ESTA JUGANDO CON FUEGO Y SE VA A QUEMAR. POBRE BELLA CUANDO DESPERTARA,ESPERO CON ANSIAS EL SIGUIENTE CAPITULO,ESTE BUENISIMO COMO SIEMPRE

diana dijo...

la verdad porq se la paso pensando en bella comparandolas la verdad no lo entiendo encima sigue con ella mucho much remordimiento pero siguio y siguo es es un guacho cuando se entere bella se pudre todooooooo

Medy dijo...

aii no creeo que aguantee asta que salga el otro capituloo este estaaa genialll igual que los otrooooss!!

yolanda dijo...

M e puesto al dia con este fic y alejandra cielo m vas a matarrrr,jajajaja por diosssss has creado el anti edward has conseguido q le odie,jajajaja yo q amo a esta pareja por q representan el amor puro,la lealtad,fidelidad una vez q se enemoran no hay nadie q les pueda complementar tan profundamente q no se han ellos...y este edward es egoistaaaaaaa,manipulador,machista e infielllllllllll...madre miaaaa le odiooooooo....a si q m a salido la vena feminista y deseo q sufra por ver a bella q no despierta,tenia q haber estado a su lado pero no se va a tirarse a la viczorra ¡ojalá! bella lo descubra q se entere o les pille y si de paso le puede ser infiel mejor y si se entra muchooooo mejor,jajaja por q a nstras siempre nos toca el papel d llorar y ser fieles y ellos yo puedo tirarme a quien sea y tu no ¡ja!la ley del embudo...estoy deseando ver sufrir a edward d verdad por q bella le ignore y muerto de celos...ayyyyyyyyy...estoy q muerdo....a ver como continua...dsd madrid con amor...bssss

Marie Emma Cullen dijo...

noooo!!!!!!!
Cielos, alejandra Rivas, no puedes hacer esto!!!! q ni se te ocurra matar a Bella!!! además... maldito Edward, lo amo pero... como se atreve a engañar a la pobre de Bella? ojala y no se entere, q Victoria se muera!!!.... no dejes q Belli, Bellita muera!!!.... el cap, perfecto, of course!!!!
bueno, esperare con demasiadas ansias el proximo cap... besos!!!!!

Lizzy dijo...

Las mentiras tienen patas cortas y tarde o temprano Bella se va a enterar y va a ser ahi que va a perder todo lo que tenia por idiota.
Cuidate mucho y nos leemos siempre...
http://miangelpersonal.blogspot.com/

nydia dijo...

OMG no puede ser que a la pobre Bella le este pasando eso dios espero despierte pronto...Sigue asi..Besos...

Elva Yesenia dijo...

que mal se esta portando pero ya quiero leer cuando se entere como lo va a poner

pepita dijo...

hola corazon es la primera vez que comento y la 2da vez que entro a tu blog y me encanto la historia . Me tienes enganchada jiji. muy linda la historia . Pero bueno me gustaba Edward pues pense que dejareia ha Victoria pero bueno ahora lo odiooooooooooooooooooo jiji . Edward tiene todo lo malo que hacen los hombres uffff Bella cuando se entere lo va despellejar jiji . esto se va ha poner al rojo vivo ... buena historia , gracias por compartir seguire pasando por aqui y luego leere tus otras historias .

Claudia dijo...

pero que Edward mas desgraciado!!!.. jugando a dos bandas... uff... me imagino el desastre que va a quedar cuando Bella se entere... ahi si que la va a sufrir este pobre diablo...
Espero mas que ansiosa el prximo capitulo!!!
besos y está muy buena la historia