jueves, 29 de septiembre de 2011
miércoles, 28 de septiembre de 2011
Poster de Publicidad para los Cines
haha rei montones!!!!
Soundtrack Amanecer
Co-escrita y producida con los Smeezingtons (Mars, Philip Lawrence y Ari Levine), Mars ha estado trabajando en lo que se convertiría en "It Will Rain" durante el camino, antes de hacer la llamada para contribuir con el soundtrack. Él dice "después de ver la película, pensé que encajaría perfectamente."
"It Will Rain" saldrá globalmente el 27 de septiembre. El 26 de septiembre, la lista de canciones completa y el álbum de Summit/Chop Shop/Atlantic, saldrá el 8 de noviembre en las tiendas.
Mars dice, "Las películas de Twilight son para mí una historia de amor. Pero es una historia de amor oscura. Y creo que la mejor manera de describir la canción es: el lado oscuro del amor. Creo que eso lo resume más o menos todo."
"'It Will Rain' empezó conmigo y con la guitarra," dice Mars, "y tenía ésta melodía en mi cabeza y básicamente la terminé después de ver la película."
El suertudo de Mars pudo ver "la mayor parte de la película" así que "pudo captar el ambiente y el sentimiento con lo que va todo ello." Pero, no sabe (o no se imagina) dónde será escuchada la canción en la película. "¡No tengo ni idea! Mientras no esté en los títulos finales de crédito... ¡Espero que esté en una buena escena!"
Mars dice que "It Will Rain" solo está hecha para el soundtrack de The Twilight Saga: Breaking Dawn y no para su segundo álbum que está por llegar. "Personalmente pienso que si hice esto para el soundtrack de Twilight, entonces esto es para el soundtrack de Twilight," dice. "Esto no es para mí álbum."
Los dos primeros soundtracks de Twilight llegaron al puesto número 1 en la lista Billboard 200, mientras que el número 3, "Eclipse," alcanzó el puesto número 2 el año pasado. En general, han vendido 4.5 millones de copias en los Estados Unidos.
¿Sería posible ver una colaboración en el futuro entre Mars y la estrella de Twilight Robert Pattinson? Esto último ha estado como noticia después de que los rumores empezasen a extenderse sobre que él estaba trabajando en su propio álbum. (Y resulta que no está "trabajando en un álbum ahora mismo.")
No lo descartemos por el momento: "¿Por qué no?," dice Mars. "Estoy disponible para cualquier persona que quiera trabajar conmigo y piense que puedo contribuir en algo."
Listado.
The Joy Formidable- Endtapes.
Agus & Julia Stone Love Will Take You.
Bruno Mars- It Will Rain.
Sleeping At Last- Turning Pace.
The Features- From Now On.
Christina Perri- A Thousand Years.
The Ophilus London- Neighbors.
The Belle Brigade- I Didn´t Mean It.
Noisettes- Sister Rosetta (2011 versión)
Cider Sky- Northern Lights.
Iron & Wine - Flightless Bird, American Mouth [Versión de la boda]
Imperial Mammoth- Requiem On Water.
Aqualung & Lucy Schwartz- Cold
Mia Maestro- LLovera-
Carter Burwell- Love, Death, Birth.
Entre dos Tierras
Capitulo 30.- Preparación para la batalla.
Jasper pov
-¡¡¡¡demonios Emmet, Jasper, Edward, dejen de actuar como niñas, golpeen fuerte carajo, los Vulturis no me harán cosquillas precisamente, de nuevo!!!- gritaba Bella mientras peleábamos como parte del entrenamiento.
Llevábamos 30 horas con eso, desde que tocamos suelo italiano y apenas pusimos un pie en la residencia Cullen, Bella no había parado ni nos dejaba parar, era una faceta que no conocía de ella, era realmente escalofriante.
Emmet arremetía de nuevo contra ella, Edward trataba de atraparla y ella trataba de esquivar los golpes, al tiempo que me atacaba, a veces con suerte, a veces terminaba en el suelo, en la última lanzada su cuerpo se agrieto ligeramente.
-Bella te vas a lastimar, cariño basta, tienes que detenerte- Edward trataba de contenerla.
Ahora ya no había nada que se interpusiera entre ellos, Melisa había aceptado ante todos que no lo amaba, se vio forzada a mantenerlo a su lado para sus planes, después de la quinta suplica, decidimos perdonarla, al final de todo era nuestra hermana y sabíamos que no la había hecho con intenciones maléficas, solo se había equivocado en no confiarnos el problema desde el inicio.
Por lo que Bella y Edward regresaron, aunque mi hermanita ahora mismo estaba realmente fuera de control y no paraba de entrenar, ya había vencido a Rosalie, Alice, a Jacob le había roto todas las costillas, antes de detenerse, con Melisa no quiso practicar, “podría matarla sin pensarlo” fue su excusa y a como estaba todos creímos que si sería capaz,
-prefiero enfrentarme a todos los Vulturis juntos que ponerme frente a esa lunática desquiciada- fue el argumento de mi sobrina.
Ojala yo tuviera esa sensatez, me venció sin tocarme, apenas trate de calmarla, me regreso un poco de angustia y dolor extremo que me hizo revolcarme, si Edward no la hubiera besado como si muriera de no hacerlo, el muerto habría sido yo.
-bien bola de niñas, descasen, en una hora comenzamos, Jacob ¿como estas? ¿listo para otro encuentro?- pregunto al tiempo que se acercaba al lugar donde Jacob se reponía de su ultimo “encuentro”.
-no, quiero que me quede algo de esposo cuando esta pesadilla termine- intercedió Vanessa
-si no practicamos mas, será él quien es quede sin esposa - se giro mirándonos a todos - se que no soy fácil de complacer, que les asusta lo que ve en mí, pero les aseguro que solo intento estar preparada y que ustedes lo estén también para lo que sea que nos espera allá, odiaría perder a cualquiera de ustedes por no estar a la altura y mi motivación principal es sacar a Carlisle y Esme de allá con vida y tan completos como sea posible – término al tiempo que una lagrima, la primera desde que esto empezara, corría por su mejilla, sin decir más se interno en el bosque.
-espera Edward, déjala, necesita estar sola un momento- tome a mi hermano del brazo antes que la siguiera.
-¿Qué le pasa?, es como si no fuera ella- pregunto Alice sentándose junto a Jacob, todos nos acomodamos alrededor.
-está asustada, enfadada, preocupada, todo a la vez, pero lo que más teme es que no lleguemos a tiempo- respondí mientras trataba de canalizar y separar mis sentimientos de los de Bella.
Sentí como Alice se tensaba, la mire, sus ojos se movían con mucha rapidez y sus labios ligeramente abiertos temblaban estaba teniendo una visión, mas fuerte y diferente que las demás. Esto era nuevo, considerando que Jacob y Vanessa estaban a su lado. Cuando termino nos miro con el pánico en sus ojos, Edward se pudo serio, mientras los demás esperábamos que nos dijeras de que se trataba, antes que alguno dijera palabra, escuchamos el grito de Bella no muy lejos.
-Esme estará muerta para la noche, la matarán cuando trate de defender a Carlisle, lo condenaron en nuestro lugar, por el evento de la semana pasada- logro decir Edward.
Bella llego a toda velocidad por el sendero, no había expresión en su rostro.
-vamos, tenemos mucho que entrenar- dijo mientras la seguíamos.
Pasamos todo ese día entrenando, físicamente a veces, otras era mi habilidad para manipular, las de Bella para proyectar y para escudar, cada minuto crecía un poco más, era capaz de hacer más de lo que ya hacía, su enfado alimentaba su poder y estaba completamente furiosa, seguimos así hasta unas horas antes de partir la castillo de los Vulturis, la visión de Alice seria esa noche, debíamos llegar a tiempo para detenerlo.
Necesitábamos tiempo para estar tranquilos, actuar como hermanos una última vez, Bella sorprendiéndonos de nuevo recupero esa actitud dulce de siempre, propuso una fogata hasta la hora de partir, nadie dijo que no, nos adentramos en el bosque, platicamos como en New Hampshire, las bromas de Emmet no se hicieron esperar y como siempre Jacob era el blanco, aunque esta vez era defendido por Bella quien decía que era mejor un perro mojado que un oso bromista.
Hacia el final del descanso cada quien se fue alejando con su pareja, no necesitábamos decir nada, todos sabíamos lo que se avecinaba y no podíamos detenerlo, la única que se retiro hacia a la casa fue Melisa, sola.
Edward pov
Bella tomo mi mano mientras caminábamos hacia un enorme árbol las raíces eran tan grandes que podíamos sentarnos encima de una y no darnos cuenta de lo que era, se sentó sobre mis piernas en cuanto me acomode, sin palabras me beso, suavemente al principio y con urgencia después, sin mucho preámbulo me quito la camisa mientras se pegaba mas a mi cuerpo, apenas tuve oportunidad de quitarle la blusa y para no detenerme después el sostén también, se levanto con gracia mientras se desprendía del pantalón. La mire embobado, como había extrañado su cuerpo, su calor, sus caricias, su piel. De alguna manera su cuerpo se veía redondeado. Lleno. Estaba hermosa.
-aun debes hablar con Melisa, aclara este asunto bien, quizá no deberíamos hacer esto- dijo mientras hacía por levantar su ropa.
-no, no princesa, lo siento pero ya hice el esfuerzo por días de estar sin ti, no hay manera que pase este, sin hacerte el amor, nada ni un ejército de Vulturis me va a detener ahora, estoy caliente, dispuesto y puedo decirte que mas que excitado así que si no me complaces tu… bueno tendré que buscar quien lo haga, pero yo así – señale la deformación de mi pantalón- no me quedo, decide que harás al respecto- rete.
-podría hacer esto- mientras movía los dedos los botones se liberaban.
Adoraba esta habilidad suya, sin esfuerzo movió un poco más la mano hasta que saco mi pantalón por completo, lentamente se deshizo de mi ropa interior, todo con esa mirada de traviesa que al parecer había aprendido a usar para otras cosas, como esta, con toda la calma que pudo reunir camino hasta mi, moviendo la cadera cadenciosamente, aun le quedaba la braga, de un azul eléctrico, así, camino hasta dejar su vientre justo frente a mi rostro, sin dudar lo bese, me seguí con la línea de las bragas siguiendo el borde por su cadera, tome su cintura entre mis manos mientras lentamente bajaba la prenda.
Roce mi boca contra su pierna y gimió, justo de la manera que me ponía al límite, lentamente descendió hasta sentarse sobre mí, mientras rodeaba con sus piernas mi cadera y sus brazos en mi cuello, froto suavemente su humedad contra mí, mientras me besaba otra vez, despacio sin prisa, deslice mis manos por su espalda hasta llegar a sus nalgas, las apreté mientras levanta su cuerpo para deslizarme en ella, ante el primer contacto de su calor gemí sin evitarlo, se aferro a mi cuello mientras se levantaba sobre sus piernas, marcando el ritmo y profundidad, volviéndome loco con cada movimiento, cuando sus movimientos fueron erráticos y sin control la tome de la cintura, moviéndola siempre arriba y abajo, el orgasmo estaba cerca, podía sentirlo en mi y segundos antes en ella, cerrándose de esa manera que me arrastraba hasta la más deliciosa de las locuras.
Pasaron solo minutos, nos quedamos abrazados aun con mi sexo dentro de ella, sentí que apretaba y soltaba alternadamente sus músculos, haciendo que cobrara vida en su interior, eso era nuevo y tan excitante que los gemidos que me arrancaban dejaban claro cuánto me gustaba, sin mucha espera se tiro hacia atrás llevándome con ella, lentamente salí y entre al principio, cada vez que entraba cerraba su cuerpo haciendo que fuera mucho más placentero, por desgracia también más rápido, era demencial la manera como me apretaba con cada embestida, apenas unos minutos después me vacié por segunda vez mientras gritaba mi nombre, la bese suavemente tratando de recupere el centro, no nos quedaba mucho tiempo mas, debíamos partir a enfrentar el destino, para bien o para mal era mía y yo era suyo, eso nada lo cambiaría.
Todos parecíamos estar en sintonía, apenas habíamos llegado a la fogata cuando aparecieron mis hermanos, nos reunimos alrededor del fuego, como en un cuento de hadas, nos tomamos las manos, nos miramos sin pronunciar palabra, la calma de Jasper era patente en cada uno de nosotros. Melisa se unió al grupo, la abrace fraternalmente, jamás la vería de nuevo como mujer, gracias a dios ella pensaba lo mismo de mí, después de 200 años y una maravillosa hija solo éramos hermanos.
-es hora, estamos listos, quiero que sepan que sin importar como termine esto ha sido un placer compartir con ustedes mi existencia como vampiro, que los amo a todos, bueno en este momento a Melisa no- nos reímos- pero si sales viva de esta y de la paliza que te daré al regresar a casa, creo que podre quererte tanto como a Alice, Vanessa y Rosalie- agrego mirándola directamente.
-si pudiera escoger una mujer para Edward, definitivamente sería alguien diferente a ti, pero como no me toca a mí, me da gusto que seas tú – respondió la advertida.
Mi mujer solo asintió sonriendo un poco.
Nos montamos en los autos rentados, una Hummer en negro para Bella, ella manejaba, me senté a su lado, Alice y Melisa nos acompañaban, adelante en un jeep blanco cerrado iban Emmet al volante, Rosalie, mi hija, Jacob y Jasper. Ambos volaban sobre la carretera, el camino hacia el castillo, no había mucho tráfico y para cuando llegamos estaba anocheciendo.
Entramos al edificio por la puerta principal, nos presentamos como los hijos Cullen, de inmediato Félix y Dimitri junto con 5 vampiros mas que no reconocí, pero por los pensamientos de uno de ellos si sabían quiénes éramos y a que veníamos, Melisa palideció, con toda la intensión la tome por la cintura al tiempo que avanzábamos, nos guiaron por los túneles bajos, el mismo camino que hace 200 años siguiera con Melisa de la mano.
Esta vez caminaba con ella pero por un motivo diferente y con un sentimiento distinto. Los primeros en entra fueron Emmet, Jasper, después Alice, Melisa, Vanessa, por ultimo entre yo seguido de Bella quien estratégicamente se quedo hasta el final, canalizaba mi habilidad pudiendo escuchar todo lo que yo captaba, mientras magnificaba el poder de Jasper. Sin dejar de revisar el escudo de Melisa, estaba realmente concentrada.
-bienvenidos Jóvenes Cullen, es un placer siempre verlos, querida Alice, tan hermosa como siempre, Rosalie que belleza la tuya, mejora con los años, Melisa querida tardaste tanto en venir, Jasper siempre tan relajante contar contigo, Edward, ¿alguna vez estarás en paz?, Emmet cada año más grande, Vanessa un placer como siempre verte y finalmente Bella, pensé que jamás llegaría este día, pero ya estás aquí, bienvenida a casa…-
Capitulo 31.- Juez y verdugo
Esme pov
-Carlisle amigo mío, hace tanto que no te veo, gracias por venir con prácticamente nada de anticipación, de verdad lamento este asunto que nos reúne ahora-dijo Aro apenas entramos al recinto.
La falsedad era tan clara como el día y sin embargo mi esposo sonrió como si de una gran verdad se tratara.
Esto no me gustaba nada, estaba todo mal y lo peor era que no podría hacer nada por defendernos, no sí la vida de nuestro hijos estaba en juego.
-Aro, siempre me da gusto verte, aunque en condiciones diferentes, las ultimas han parecido no ser pacificas, por favor si puedes decirme de que se trata este asunto que involucra a mi muchachos, hasta donde sé, no han hecho nada fuera de lo permitido – fue directo al grano y sin mucha palabrería.
-Carlisle, mi amigo, todo a su tiempo, mañana celebraremos consejo y expondremos la situación de tus muchachos, no seas impaciente ahora, te pido disfrutes de nuestras hospitalidad en el castillo, Gorth te mostrara tu habitación, eres libre de moverte por interior, solo te pido, notifiques si requieres salir, para que alguien te acompañe, a ambos- rectifico mirándome e incluyéndome en las ordenes.
Un vampiro, joven y guapo se acerco, me pareció raro el color de sus ojos, más que rojos eran… dorados.
-¿acaso somos prisioneros, Aro?- pregunte sin poder contenerme.
-Esme querida - al tiempo inclinaba la cabeza en señal de indulgencia- no, por supuesto que no, pero dada la situación que les trae por aquí, lo mejor sería no dar malas señales, o hacer cosas que puedan prestarse a malos entendidos-
-bien, entonces si no somos prisioneros y nos permites salir, quisiéramos cazar un poco, ya sabes, para poder estar claros en el consejo ¿hay algún bosque dentro de tus dominios? –
-por su puesto amigo, Dimitri los acompañaran, podrán partir en cuanto haya oscurecido, de igual manera siéntanse libres de pasear por la ciudad, en su compañía, claro está- termino al tiempo que se alejaba.
Heidi estaba por llegar, podía sentir el olor de los humanos, no quería presenciar eso, salimos tan rápido como nos fue posible, siempre seguidos por Dimitri.
Caminamos unas horas por la plaza, Dimitri aprovechaba para hablarnos de la historia del lugar, como si no la supiéramos, Carlisle estuvo en su construcción, pero sonreír y aparentar interés era necesario, aun no habíamos tenido la oportunidad de platicar, de hacer un plan de contingencia, de ponernos de acuerdo.
¿Qué hacer si exigían la vida de nuestros hijos?
¿Pelear?… y fallar, porque sin duda perderíamos…
¿Entonces qué? ¿Dejar a los chicos a su suerte?
Esas preguntas rondaban en la mente de mi esposo y en la mía, no necesitaba leerle para saberlo, lo conocía de siglos atrás, toda mi vida empezó con él, dándome una familia, Edward ya existía cuando me convirtió, después llego Rosalie, Emmet fue el neófito más complicado, después llegaron Alice y Jasper, nos encontraron, Melisa y todo el drama que pasaron antes y después del nacimiento de Vanessa.
La inclusión de un lobo en la familia, nos tomo años superar el olor, pero pudo más el amor que sentimos por él que la peste que le acompaña, él dice lo mismo de nosotros. Y por ultimo Bella, la más pequeña de mis hijas, la más sentimental, no se tiene la manera de pelar con su encanto natural, su sonrisa, su mirada, todos mis hijos morirían por ella y me temo que en este asunto ella moriría por todos nosotros.
Su familia.
Nuestra familia.
Morir por la ella, eso era lo que Carlisle haría, se sacrificaría por nuestros hijos, por mí. Bien, si eso era lo que se necesitaba, entonces lo haríamos… juntos…
Carlisle pov
-nos gustaría tener un momento de privacidad, Dimitri, no tienes de que preocuparte, no iremos a ningún sitio, tienes mi palabra- hable con voz clara, mi palabra no necesitaba garantías y todos lo sabían.
-no necesitas decirlo Carlisle, lo sé, pero me temo no puedo dejarlos solos, aunque si es algo intimo creo que de aquel lado hay algo que me interesa mucho y tardare al menos una hora en volver, ¿si no les importa claro? - dijo al tiempo que se machaba, dándonos espacio.
Vaya un Vulturi amable… o una trampa para saber que decíamos.
-ven, bésame- dijo mi esposa al tiempo que jalaba hasta un árbol - nos matarán ¿verdad? - susurro al tiempo besaba mi cuello, si apenas podía escucharla yo, Dimitri no lo haría.
-es probable, siempre han querido a Edward, Alice y Melisa, ahora saben de Bella, lo poderosa que es, no nos dejaran partir- respondí mientras besaba su cuello y me deshacía de su vestido, dejándola casi desnuda.
-a menos que se unan, nos están usando para intercambiarlos, no podemos dejar que eso pase- susurro besándome apasionadamente.
Por un instante perdí el hilo de la plática, tenerla así, esa desquiciante.
-hum, no, no podemos- me tumbe sobre ella en una roca - pero solo por unos momento, permitámonos hacer esto bien- al tiempo que entraba en ella.
Su cuerpo se arqueo de esa manera tan deliciosa que me enloquecía, con cada empuje me sentía más cerca del límite, mi adorable esposa se aferraba a mí con una intensidad desesperada, al tiempo que decía mi nombre. Al poco ambos estuvimos complacidos y descansando uno en brazos del otro.
-ahora sí, Cullen, presta atención, tu sabes más que nadie de este mundo, encuentra lo que sea para salvarlos y salvarnos, no te dejare morir, no sin pelear, ¿lo entiendes?- dijo sin titubeo, mirándome con toda la determinación del que era capaz.
Supe que lo haría, se dejaría matar sin pensarlo por defenderme. Pero ¿Cómo defenderla? si aun no sabía que excusa estaba agarrándose Aro para esto.
-debe tratarse de algo mas Esme, Aro no se atrevería a usar una banalidad si no persiguiera un fin especifico, ahora sabe que nuestro aquelarre es más grande y poderoso, no creo que matarnos le convenga, tu idea del intercambio me parece más razonable, aunque no se a quienes pedirá y lo peor, los chicos no se dejaran tratar así, probablemente quieran dar pelea, por eso debemos forzar el veredicto, si no resulta favorecedor para la familia sacrificarnos será lo mejor, así no podrán someterlos. No tendrán como retenerlos-
-¿y si buscan venganza? tu sabes cómo se ponen Edward y Emmet cuando de la familia se trata-
-bueno, ya son adultos Esme, creo que sabrán apreciar el esfuerzo que estamos haciendo, además no creo que Bella los deje, esa niña mantendrá a la familia unida, está destinada para ser líder, sin nosotros ella y Edward se encargaran de todos, los cuidarán, aunque no esté juntos-respondí.
Suplicaba a algún poder superior no equivocarme, suplicaba que mi niña fuera sensata y entendiera que no debían venir, que entendiera que todo esto era por ellos. Me concentre en mi esposa, la bese otra vez.
Le hice el amor otra vez, quizá fuera la última, esta vez más lenta que la primera, con más pasión si era posible, con toda la ternura que me inspiraba, nos entregamos como cada vez y como cada vez era diferente e increíble, morir en su brazo era lo mejor que me podía pasar, hipotéticamente hablando.
Ahora entendía… ya entendía que fue lo que le hizo perder la cabeza a Edward, podía ver en sus ojos cuando miraba Bella, mi semblante al mirar a mi esposa, ahora me daba cuanta que siempre fue Bella la mujer para él, ojala me hubiera dado tiempo de decírselo, mi hija piensa que me decepciono y mi hijo que me defraudo, aquí estoy muriendo por ellos y no sabrán que por fin entendí su amor, al menos estarán vivos para amarse.
Si Melisa es lista y se da cuenta.
-Carlisle es hora de volver- se anuncio Dimitri, los ruidos que hizo desde kilómetros atrás, nos habían dado tiempo de vestirnos, aun estábamos abrazados en el mismo lugar donde pasáramos haciendo el amor después de nuestra platica.
-sí, gracias Dimitri- mientras agradecía su discreción, habíamos tenido tiempo de despedirnos y de planear el curso de acción.
Si había intentado escuchar o no, no era relevante. No habría escuchado nada.
Al llegar nos asignaron una habitación, no hablamos más de lo necesario y a pesar de no dormir, decidimos acostarnos, abrazarnos y tratar de organizar nuestros pensamientos, estuvimos ahí hasta que la noche dio paso al día, un leve toque en la puerta no indico que era tiempo.
Nos vestimos para la ocasión, era completa y estúpidamente formal, Esme se veía hermosa en su vestido negro largo, se ajustaba justo en los lugares apropiados, me encendí de inmediato, se acerco, rozando con sus manos mi erección.
-si salimos de aquí, me hare uno igual y te dejare que lo arranques- me guiño un ojo.
Se dio la vuelta y camino hasta el tocar para terminar de arreglarse. Sonreí ante la idea y después recordé que tal vez no saldríamos, por el reflejo en el espejo de su rostro supe que también ella lo pensaba.
La abrace sin ceremonias, con la rapidez que nos permitía el ser vampiros subí su vestido hasta su cintura, desgarre la braga y sin más demora la hice mía sobre la barra de granito que hacia el trabajo de tocador, tape con mis besos su gemidos, era casi animal la forma que me movía, no podía parar, no había tiempo para delicadezas, entre susurros apenas audibles me pedía más agarrándose de mis brazos, apenas unos minutos después nos liberamos al mismo tiempo, su mirada era completa, ahora podía soportar lo que viniera.
Minutos después salimos por la puerta, donde nos esperaba una guardia pequeña, si escucharon lo que pasaba dentro no dieron muestras de ello.
El tribunal estaba reunido, no éramos los únicos en estar bajo consejo, por lo que tardarían en terminar, no me gustaba la espera, eso daría tiempo a mis hijos de venir si Bella no lograba convencerlos o controlarlos y entonces no habría manera de evitar un enfrentamiento, de salvarlos de sí mismos.
Y así con todas las personas reunidas, el consejo empezó, había de todo un poco entre los que esperábamos ser escuchados y escuchar por el motivo que nos tenía ahí.
Dos días después fue mi turno, las acusaciones eran claramente insuficientes, pero estaban bien respaldadas por los posibles eventos que pudieron ocurrir, defendí lo mejor que pude, pero ya habían decidido castigar a mis hijos sin importar si tenían razón o no, mi aquelarre era muy poderoso no dejarían que siguiéramos juntos.
Entonces entendí el cuadro completo, los muchachos estaban juntos por nosotros, si Esme y yo desaparecíamos se separarían, o al menos eso es lo que pensaban los Vulturis y podrían tener a todos lo que quisieran, eso significaba que Esme moriría también, no la dejarán regresar, ella no dudaría en defenderme y con eso contaban.
Sentenciaron a los chicos a morir en 2 días, debían ir por ellos y traerlos, sin previo aviso Esme hablo, lo sabia tan bien como yo.
-No, Carlisle y yo tomaremos los lugares de nuestros hijos, yo sé que el consejo entenderá, las habilidades de ellos son muy importantes para que se pierdan, ¿les parece bien el cambio? –
-Esto no es lo usual, querida Esme, necesitamos consultarlo con calma, tendrán la respuesta en breve. Ahora pueden retirarse a sus habitaciones-
Nos marchamos sabiendo que el final estaba cerca, pero… ese olor… no, no, los chicos estaban aquí, todos ellos.
Carajo, adiós al plan.
-hemos venido por nuestros padres…- alcance a escuchar
Capitulo 32.- La trampa.
Bella pov
-bienvenida a casa…-
sus palabras se repetían en mi cabeza mientras nos tomaba por sorpresa a todos, sabía mas de mí de lo que parecía decir, canalice a Edward mientras escuchaba sus mente, pero no revelaba gran cosa, sabiendo de la habilidad de esté se guardaba muy bien sus pensamientos.
-hemos venido por nuestros padres y para saber de qué se trata este asunto, sabemos que se celebro un consejo, nos gustaría conocer todos los detalles del mismo y si nos lo permites declarar en este caso, sabemos también que es debido a cierto evento que llevamos a cabo hace unos días- hablo Edward siendo el mayor de todos los Cullen, al menos de manera oficial.
-me temo que eso no será posible, tus padres fueron sentenciados a muerte por el delito que ustedes cometieron, justo ahora serán llevados a cumplir dicha sentencia, lamento que no llegaran antes para evitar esto, aunque eso habría significado que ustedes morirían…-dijo Aro.
-No, exigimos verlos, no han hecho nada malo y no tienes razones para castigarlos por nuestros actos- se impuso una vez más.
Mientras escuchábamos sus pensamientos.
- ¿hay algo que podamos hacer para evitarles la muerte? - pregunto Edward ya sabiendo la respuesta.
-esto no es común en verdad…-
-déjate de estupideces Aro, sabes también como yo, que quieres a Alice, Jasper, Melisa, Vanessa y a mí, bien, me quedare a cambio de Carlisle y Melisa se quedara a cambio de Esme, pero nadie más, estaremos a tu lado el tiempo que acordemos y después seremos libres y dejaras en paz a mi familia- concluyo sin más preámbulo.
-pero hay algo en lo que te equivocas, si es cierto que hasta el último “encuentro”, ustedes eran lo que más queríamos, ya no es así, veras después de regresar a casa, encontramos un vampiro con habilidades de oráculo- dijo
Mis hermanos y yo nos colocamos en línea uno junto al otro. Me quede hasta el final, junto a Edward. Mis ganas de tomar su mano y decirle que todo estaría bien era enormes, pero no era el momento.
-él vio a la más poderosa entre los vampiros, una humana convertida que llegaría lejos sin duda, que nos daría el poder para seguir manteniendo el orden y que sería el camino para que ustedes vinieran, hemos vigilado el sitio donde ella existiría, hasta hace unos meses, cuando por fin la encontramos, en su territorio, mis hombres la convirtieron pero esos malditos lobos no dejaron terminar el proceso, después tu familia se involucro, Alice para ser exacta, tus visones interfirieron con mis planes por lo que tuve que conseguir quien te bloqueara, no eres fácil de contener querida –dirigiéndose a Alice.
Nos miramos sin entender de qué carajos hablaba, mis hermanos nos taladraban con sus preguntas, Alice sobre el cómo evito que tuviera visiones, Emmet sobre cuanto quería arrancarle la cabeza, Jasper en cuanto deseaba hacerlos polvo, Rose pensaba que si Esme o Carlisle, tenía un cabello menos, le arrancaría los ojos a Jane y se los daría de postre, Vanessa pensaba que esta vez su madre la había cagado con ganas, Melisa no me dejaba entrar y no quise forzar su mente, tenía muchas cosas que hacer todavía. Edward pensaba… en cómo mantenerme a salvo de Aro.
-cuando mi gente llego de nuevo, ya no estabas ahí, seguirte la pista fue fácil, donde los Cullen estuvieran ahí estarías, Melisa fue perfecta, te aparto de Edward para evitar que se marcharan, lo siento querida, nunca pretendí usarte pero mis fines fueron más importantes que el medio –se dirigió a Melisa- Bella querida, tu puedes salvarlos a todos, solo tienes que aceptar quedarte conmigo- dijo al tiempo que se acercaba a mí.
-“por eso no te mataron”- pensó Edward.
-“sobre mis cenizas, no dejare a mi hermanita contigo cabrón”- Emmet
-“hijo de puta…”- Jasper.
Eso me tomo por completo desprevenida y por la cara de Edward también a él, Jasper debía ser el vampiro más educado y correcto después de Carlisle.
-“lo mato”- Rosalie.
-“¿y tu nieve de que la quieres?”- Alice
Deliberadamente pase por detrás de Edward, al tiempo que tocaba a cada uno de mi familia, zigzagueando entre ellos, un plan se formaba en mi cabeza a la velocidad de la luz, tenía poco tiempo para actuar, no me quedaría, él no me quería para ser aparte de su aquelarre, me quería para ser su esposa, la ultima que necesitaba para incrementar su domino. Edward quiso saltar sobre Aro y apenas logre calmarlo,
- “tengo un plan”- dije, se calmo solo un poco.
Solo un poco.
Seguí mi caminar mientras fingía pensar en su propuesta.
-quedarme contigo…- lo mire tan coquetamente como pude, mientras me acercaba a uno de los tipos que estaban ahí, lentamente lo toque en el estomago, mientras le sonreía.
-¿y tú eres…?- pregunte deteniéndome y apoyándome sugerentemente sobre él, Aro se puso serio.
Edward estaba furico.
- Félix- contesto completamente excitado.
Después de todo Jasper era bueno en lo suyo, seguramente estaba manipulando el deseo de todos los presentes mientras Melisa cubría a la familia.
- Félix, me gusta- respondí en un susurro.
Camine hasta el otro extremo tocando sutilmente a Aro, de inmediato respondió a mi caricia, bloquee su habilidad no dejándole ver nada, seguí hasta el otro vampiro, uno enorme quién casi se babeaba por Alice, tardaría mas en caer pero lo haría al final, Edward se encargaría de eso.
Camine hasta rodearlo mientras lentamente lo tocaba por la espalda, dejando que mis caderas lo rozaran lentamente, el pobre Edward casi moría de los celos.
-“Basta, estas yendo muy lejos Bella”-
- “Hasta que no salgamos de aquí hare lo que sea necesario, aguanta”-
-¿y quién eres tú? – pregunte casi en un susurro.
- Dimitri- mientras quitaba sus ojos de Alice y los ponía en mí
- hum. Me gusta más todavía, pero no lo digas- susurre solo para él.
Me apoye intencionalmente en Dimitri.
- así que Aro, tu deseas me quede aquí, ¿que recibo a cambio? - pregunte mirando al interrogado
El vampiro a mi espalda hacía un gran esfuerzo tratando de ocultarme su excitación, me gire levemente y de forma nada sutil moje mis labios sugerentemente.
-serás parte de un clan poderoso, podrás hacer lo que te plazca- respondió ansioso por mi respuesta afirmativa.
-pero cariño eso ya lo tengo, hasta donde yo sé y entiendo Los Cullen son en este momento el clan más poderoso y ya hago lo que quiero, ¿Que mas me puedes ofrecer? - Pregunte
Con toda la intensión mire a Dimitri.
Aro siguió mi mirada. Su ánimo empeoraba a cada instante, no tardaría en perder el control y esa sería nuestra señal de ataque.
-¿que deseas obtener?- pregunto un poco menos tranquilo en apariencia.
-¿qué te parece la verdad por la cual me quieres a tu lado, en tu aquelarre?- pregunte al tiempo que me situaba frente a él, quitándome el abrigo, era tiempo de arriesgar un poco más.
Las chicas me siguieron. Todas vestíamos blusas muy pequeñas anticipando la lucha y pantalones deportivos, los cuales serían mucho más cómodos para pelear, pero que también eran más provocativos.
Los gemidos no se hicieron esperar haciendo que Emmet y Edward se tensaran más todavía, Jasper manipulaba el ánimo de los demás y al mismo tiempo trataba de calmar a los chicos, celosos por naturaleza.
-bien, si es lo que se requiere para que te quedes que así sea, pero no aquí, no ahora, antes la ejecución- al tiempo que Carlisle y Esme entraba con ropas de prisioneros y sujetos por varios Vampiros.
Verlos así nos saco de concentración y todos adoptamos posiciones de ataqué listos para defenderlos.
-no, primero la verdad y luego la ejecución, no te equivoques, no es sentimental, es cuestión de saber que me conviene- ataje rápidamente.
Me acerque un poco más a él.
-bien, mi oráculo asegura que tú serás capaz de concebir, la única en todo el reino de vampiros que tendrá la capacidad, tus habilidades te lo permitirán, pero debe ser en el momento justo, una vez cada 100 años y cada hijo será igual de poderoso que tu y yo, reinaremos en este mundo y el de los humanos, no habrá más discordancias, ni rebeliones, no habrá quien se interponga en nuestro camino. Te convertiré en la mujer más poderosa que nunca se ha visto, serás la esposa favorita, todos morirían por ti y lo único que tendrás que hacer es yacer conmigo un mes durante cada 100 años, cuando concibas y nazca serás libre de “divertirte” con quien te plazca, todos estarán tu disposición - termino mientras me quedaba clavada en el lugar
¿Yo podría tener hijos?
-¿Cómo podre tener hijos sí mi cuerpo es igual al de todas las demás?- pregunte sin poder aguantar.
-porque tus habilidades crecerán mas y en cada siglo con tu cumpleaños tu cuerpo será muy parecido al de un humano por solo unos días, lo que permitirá concebir, una vez embarazada tu condición de vampiro te permitirá gestarlo sin morir en el proceso. Dentro de poco tendré mi propio aquelarre y seremos poderosos, como familia. Eso ha dicho el oráculo, no estabas enferma por casualidad, querida, tu cuerpo se preparaba para tu destino- respondió.
-en otras palabras quieres lo que Edward tiene- pregunte saliendo del shock que sus palabras causaban en mi.
No podía detenerme a pensar en eso justo ahora. Mi sospecha estaba confirmada.
Su mirada es endureció al tiempo que me jalaba sin consideración hacia su cuerpo. Inspiro mi aroma, mientras me apretaba un poco más, podía sentir como mi familia estaba a nada de saltar, mientras Jasper trataba más intensamente de controlarlos, decidí que era tiempo de ayudarlo, en unos minutos estuvieron más tranquilo, bueno todos menos Edward.
-eres buena Bella, pero yo soy viejo querida, la cosa esta así, te quedas y los jóvenes se van, te rehúsas y todos mueren. Así que cual será tu decisión cariño- pregunto al tiempo que se acerba a Esme.
Mi madre ahora estaba de rodillas, Carlisle no para de gritar que nos fuéramos, que no había más que hacer, Esme sonreía, apoyando las palabras de su esposo. Por un momento casi perdí el control y después pensé, que era momento de arriesgarlo todo.
Y así lo hice, sin aviso previo me lance sobre Aro, lo bese hasta que su guardia se acerco. Me separe solo un poco, lo suficiente para mirarlo de frente.
-deja ir a todos y me quedare a tu lado- dije, lo bese otra vez.
-no te dejare hacer esto hija- dijo mi padre.
En ese preciso momento logro soltarse liberando a Esme, los chicos se movieron en esa dirección mientras Melisa nos cubría a todos y Vanessa se aventaba sobre la guardia de Carlisle embotándolos con visiones y desconcertándolos sobre a donde debían ir.
Rápidamente avente a Aro, sobre los escalones al tiempo que sostenía a su guardia contra el techo, Emmet estaba luchando contra otros 2 vampiros y Alice, Rosalie trataban de llegar a donde Esme estaba luchando junto a Carlisle. En un momento de confusión, entraron más vampiros, tomando a Carlisle por los brazos, uno de ellos brinco sobre él, arrancándole la cabeza.
Escuchamos el grito desgarrador de Esme al tiempo que se lanzaba sobre los vampiros, siento dominada fácilmente y siguiendo el mismo destino que Carlisle.
Todo se detuvo solo por un instante mientras veíamos como eran desmembrados y otros dos vampiros prendían una enorme chimenea, con la intensión de quemarlos.
Sin poder soportar más los grito de mis hermanas y los rugidos de mis hermanos, deje que todo ese dolor, coraje incredulidad, impotencia y furia sea apoderaran de mi, sin decir más, grite al tiempo que abría mis manos hacia el techo, en tres segundos no hubo más que mi grito cubriéndolo todo, mientras hacía desaparecer a la guardia de Aro en nada más que polvo.
Sentí un dolor punzante que me atravesaba, un dolor que me partía en miles de pedazos…
Capitulo 33.- El recuerdo de los daños
Emmet pov
Carlisle evolucionaba bien, Esme aun no daba señales de despertar, las grietas no habían desaparecido del todo y Bella, hum, Bella. No la habíamos visto despierta desde cayera en la batalla, no sabíamos que hacer, Carlisle era quien sabia como proceder, pero no despertaba aún, Edward se la pasaba en el bosque con ella, sin saber cómo calmarse, Jasper se había rendido después del segundo día, estaba física y mentalmente agotado, todos los estábamos.
Por primera vez en siglos, estábamos cansados.
Mi hermanita tenía muchas heridas la última vez que la vi justo cuando llegamos a casa, la primera vez había tardado solo un día y la mitad del otro en despertar, pero no estaba como ahora, esa última demostración de poder la había agotado por completo, el único motivo por que el que no se despedazo fue porque antes de tocar el suelo Alice y Edward estaban interceptando su caída, sirviéndole de colchón, de otra manera se habría hecho polvo.
Pasamos 2 días en espera de que alguno reaccionara, Carlisle fue el primero, por fortuna habíamos cazado y en cuanto se despertó lo alimentamos para que la sangre humana no le afectara del mismo modo que a los demás vampiros. Nos miro sin saber como estábamos todos ahí, miro a un costado y pudo ver como nuestra madre aun no despertaba, se levanto de inmediato para revisarla, cuando comprobó que habíamos hecho lo que él haría nos miro y nos abrazo al punto del llanto.
O algo así.
-gracias, me han devuelto la vida y a su madre, pero me quieren decir ¡¡¡¡¿PORQUE CARAJOS FUERON?!!!! – nos grito después de: abrazarnos, besarnos y agradecernos, con su vena de padre saltándole por la frente -¡¡¡¿QUE DEMONIOS ESTABAN PENSANDO?!!! ¡¡¡PUDIERON HABER MUERTO Y ENTONCES NO HABRIA SERVIDO DE NADA NUESTRO SACRIFICIO, ME LEVA EL CARAJO!!! ¡¡¡¿QUE CLASE DE IRRESPONSABLES SON?!!! ¡¡¡NO PUEDEN QUEDARSE LEJOS DEL PELIGRO!!!- seguía gritando mientras nos mirábamos sin saber si reír o llorar.
Bueno hipotéticamente hablando.
-la clase de irresponsables que criaste, la clase de irresponsables que saben que su familia es primero porque eso es lo que nuestro padre nos enseño, eres parte de esta familia y nosotros protegemos a nuestra familia- le respondió Edward poniendo una mano en su hombro apenas entrar por la puerta.
Al momento Carlisle sonrió mirándonos con orgullo, buscando entre todos sus hijos hasta que noto que no éramos todos.
-¿donde esta Bella?- pregunto de pronto mirándonos, todos nos miramos entre nosotros y después bajamos la mirada.
-no la hemos visto, Edward no nos deja -dijo lentamente Jacob.
El único capaz de hablar, por un momento nos habíamos olvidado del terrible dolor que nos causaba esta situación.
-¿dónde está? Quiero verla- pido, no, exigió al tiempo que se ponía en movimiento.
-yo te llevo- dijo Edward.
Caminaron hacia el bosque.
Regreso Edward un rato después, tomo el maletín de Carlisle y salió, una horas más tarde, volvieron, nadie la había visto desde que llegáramos a casa, Edward la tomo en brazos y se interno en el bosque con ella. Nadie pregunto nada. No hacía falta, la mirada perdida de Carlisle era suficiente confirmación, no había despertado y quizá no lo hiciera pronto.
-bien es hora de saber que paso después que nos eliminaran- pregunto mi padre al tiempo que nos sentábamos,
-no quieres esperar a que mama despierte- pregunte al tiempo que escuchábamos un sonido suave, nos giramos y la sonrisa fue mayúscula.
-ya estoy despierta y también quiero saber cómo salimos de esta- decía mi madre mientras Rosalie y Alice le caían encima.
-Bueno, esto es lo que paso – respondió Jasper al tiempo que me apunta para comenzar el relato:
-Vimos como los despedazaban, el dolor que sentí fue algo demoledor, no atine más que a rugir mientras mis hermanos hacían lo mismo, un momento después solo pudimos escucha el grito animal y completamente desquiciado de Bella, algo mucho más aterrador que en el bosque, me encogí ante eso y después todo sucedió tan rápido que apenas lo pude registrar – comencé a platicar como si fuera parte de mis recuerdos.
Bueno eran parte de mis recuerdos
-Bella hizo polvo, literalmente, a la guardia de Aro mientras este era sometido aun contra los escalones, Jane apareció de la nada, sometiendo a Bella por la espalda, en un segundo Melisa aumento su escudo y golpeo a la tipa haciendo que Bella se diera la vuelta y sin perder tiempo tomo a Jane de las manos mientras canalizaba su habilidad y la hacía caer presa de su propio dolor, sin preámbulos le arranque la cabeza al tiempo que Alice y Rosalie la desmembraban, arrojando todo al fuego, Nessie y Jasper recogían sus pedazos y los envolvían en cortinas alejándolos del fuego y de la batalla. No había tiempo de nada, cada momento que pasaba mas y mas guardias entraban, hasta que prácticamente estuvimos sometidos, los únicos que se mantenía en pie luchando eran Jasper, Melisa y Bella. Juntaron sus espaldas y se tomaron de las manos- proseguí.
-“Melisa cubre bien a la familia y a Aro, Cayo y Marco, no los matare, Jasper canaliza toda la rabia coraje y todo sentimiento negativo que percibas hacia mí, cuando los suelte tírense al piso y Melisa mas te vale mantener ese escudo fuerte” le escuche decir- es ese punto me interrumpió Alice.
-Apenas dijo eso, una visión vino a mi mente, si Bella seguía con eso, moriría en el proceso, Edward la capto y de inmediato hizo por liberarse de sus captores, por la mirada que Bella le dio supe que lo había visto también, con voz clara y sin perder tiempo dijo “si eso se requiere lo acepto” justo antes de soltar a los otros, mientras estos caían al suelo vi como cruzo los brazos mientras centraba toda su habilidad en sus manos, los abrió de golpe al tiempo que las abría lanzando todo su poder hacia el cuarto entero, nuestros captores se hicieron polvo a nuestro lado, su rostro se tenso haciéndose más duro a cada vez, los muros de granito se partieron ante el golpe de poder de Bella, algunas partes de la estructura cedieron, me sentí absorbida por algo, supe que estaba canalizando nuestra energía para poder seguir, corrimos hacia ella rodeándola y tratando de defenderla de los demás vampiros que aun estaba ahí, Félix y Dimitri no habían caído aun, la niebla de uno de ellos nos envolvió, pudimos ver como el escudo de Melisa era rodeado por ella. Entraron 7 vampiros enormes seguidos de Alec, tan grandes como Dimitri y Emmet y pensé “maldición contra eso no somos tan invulnerables”, los muchachos se lanzaron a pelear cuerpo a cuerpo mientras Bella seguía destruyendo todo a su paso, Melisa fue golpeada por una columna que colapso quitándonos el escudo, nos sentimos nada por un momento, solo fue unos segundos, al instante Bella estaba sujetando la mano de Melisa y canalizando su escudo, cuando pudo hacerlo sola la soltó, el esfuerzo de mantenerlo sobre todos y contener a la triada superior, al mismo tiempo que cubría la retirada de Nessie, quién los sacaba del edificio, estaba pasado factura, su rostro se estaba agrietando muy rápido, lo mismo sus brazos y abdomen, podíamos ver que su fuerza flaqueaba, empezaba a doblarse sobre sí misma- agrego.
-Cuando pensamos que no soportaría mas y sin saber cómo, renovó fuerzas, incorporándose y adquiriendo más poder del que tenia, en un momento domino a Alec reflejando su poder cegador, unos minutos después Emmet le arrancaba la cabeza con una rapidez sorprendente, Jasper luchaba contra uno enorme, Rosalie era azotada por otro, se levantaba y volvía a enfrentarlo, Edward luchaba contra Dimitri y yo trataba de esquivar a Félix, uno de los muros con patas que estaba cerca, trato de golpearla, al tiempo que otro, lo que provoco que Bella saltara por entre los dos, manteniéndose en el aire el tiempo suficiente para gritarnos “Jacob”. Y ante esa palara todos cambiamos de estrategia colocándonos en 4 patas, los adversarios nos miraron desconcertados, no tenían idea de que pasaba y así con las técnicas que Jacob nos enseño, atacamos desde abajo siempre y saltando sobre el cuello, totalmente perdidos por este método de pelea, derribamos y descuartizamos a 3 en el momento, justo cuando empezábamos a rodear a los otros, Bella tomo a Dimitri levantándolo contra el techo y azotándolo sin piedad primero contra el suelo, al tiempo que con la otra mano tomaba a Félix y los hacía chocar entre ello a una velocidad y fuerza sorprendente, solo requirió 2 golpes para destrozarlos- finalizo Alice con lo que yo recordaba bien, Rosalie entro en este punto en la plática.
-Era demencial la manera como Bella estaba tan fuera de control y al mismo tiempo controlándolo todo, apenas Nessie desapareció con ustedes del salón, Bella comenzó la verdadera masacre, con un solo gesto de sus manos hizo polvo cuando vampiro estaba en la sala, vampiro raso, los poderoso aun estaba luchando, Melisa cayo, por un momento me invadió la oscuridad dejándome a merced de los enormes rinocerontes que entraron, pronto todo fue claridad, no me detuve a ver que era, ataque sin miramientos al mastodonte que tenia frente a mí, me aventó una y otra vez, pero no ceje en mi intento, Bella no sería la única que tendría diversión. No podíamos dejar de luchar cuando veíamos como ella dejaba su vida literalmente salvándonos, su cuerpo estaba resintiendo su esfuerzo, cada vez que la miraba una línea gris cruzaba su rostro, o sus brazos, el esfuerzo de hacer tanto a la vez era demasiado, considerando que días atrás aun estaba en cama recuperándose del accidente. Parecía que no se acodaba de eso por un segundo me miro inspeccionando que estuviera bien y pude contemplar sus ojos, eran de un negro intenso y su rostro no era más que piedra, no había rastro en el de la chica dulce que suele ser. Me aterre solo por un momento que esta locura la sobrepasara y no pudiera parar. No fue así. Fue mucho peor- conto dando un punto de vista diferente del de mis hermanos y al mío.
Había cosas que no vi por estar luchando. Termino apenas antes que Edward interrumpiera.
Edward pov
-Mirar como estrellaba a Dimitri y Félix hasta hacerlos pedazos fue genial, mi mujer estaba realmente furiosa, pero a la vez estaba yendo demasiado lejos, su cuerpo se partía, debía detenerse pronto o no lograría salir. Alice quito a Melisa del medio, alejándola de la batalla, aun no reaccionaba. Bella hacia todo el trabajo de protegernos, la cara de Aro era indescriptible, estaba aterrado de verla en acción, su oráculo nunca le dijo que era mala idea enfadar a la vampiro más poderosa y matar a sus padres, sus pensamientos cavilaban sobre como sobreviviría, como se lograría salvar de ella, Bella me miro y después a él, levantando una ceja. Cuando peleábamos con los últimos y al someterlos, Bella camino hasta llegar a Aro
-“Te dejare vivir junto con ellos, pero deberás prometer nunca acercarte, molestar, o intentar siquiera contactar a mi familia, jamás te atrevas a cruzar en nuestro camino, no eres mas ley para nosotros, han vivido si tus estúpidas leyes y así seguiremos, no te debemos nada, no responderemos ante ti jamás y si no cumples lo que te digo, regresare, recuerda que mis poderes crece cada día y no será difícil enfadarme en tu presencia, si crees que esto es malo, espera a molestarme de nuevo, ¿lo has entendido?” Pregunto al tiempo que lo levantaba y lo estrellaba contra la pared más lejana del recinto, levantándolo una vez más para estrellarlo contra el techo y dejarlo caer hasta el suelo – recordé dejando de lado el dolor y vacio que sentía desde nuestro regreso.
Me tome un momento para seguir.
-Justo cuando pensábamos que se había terminado, una tropa de al menos 20 vampiros más acompañados de las esposas entro al salón, nos juntamos de nuevo colocándonos entre la traída y el ejército, Jasper y Rosalie se voltearon para cubrir las espaldas. La lucha estaba por empezar de nuevo cuando un vampiro joven entro, se coloco entre ambos bandos y antes que nada pudiéramos hacer, se giro dándonos la espalda y controlando a todos los guardias mientras Bella sometía a las esposas, de esta manera logramos salir. Emmet levanto a Melisa mientras el vampiro nuevo, nos dejaba ir, lo mire antes de salir. “Dile a Melisa que lo siento, que sí la amo, pero era necesario engañarla”. Él era parte del engaño. Pero por algún motivo confié en él, lo suficiente para pasar el mensaje cuando Melisa despertó- resolví dejando que Jasper continuara.
-Apenas logramos salir, aunque aún no estaba seguro de cómo, corrimos a través de los pasillos, Bella iba de ultimo cubriendo el escape, Rosalie estaba a la cabeza del grupo, unos pasos nos separaban de los autos cuando sentí su olor desaparecer, me gire buscándola y no la vi. La llame al tiempo que los demás se giraban, Rosalie tomo a Melisa. “búscala” le grito a Emmet, corrimos de nuevo hacia atrás. Renata la tenía contra la pared, el cansancio era palpable en Bella, quien apenas se mantenía en pie, su cuerpo ahora muy lastimado no respondía – dijo.
Nos miro a todos, mientras en la mente de mis hermanos cada uno recordaba la perspectiva de lo que vieron y en el caso de Rose se preguntaba por qué decidió quedarse con Melisa cuando su hermanita la necesitaba mucho más.
-Sus habilidades no le servían si su cuerpo no reaccionaba, en cuanto nos vio, abrió mucho los ojos, 4 vampiros más le cubrían la espalda a Renata, por lo que luchamos un poco más, por una mala jugada Emmet fue arrojado hacia el patio, lejos de nosotros, mientras yo peleaba con otro, el ultimo logro que Edward quedara bajo él, mientras intentaba quitarme al cuarto de encima, llegaron 3 mas, lo sujetaron listo para partirlo en pedazos, Emmet corría en dirección nuestras pero no llegaría a tiempo, me sujetaron con la misma rapidez que a Edward, mientras Bella miraba como prendían fuego a Edward antes de partirlo. Sus ojos negros antes, se tornaron Rojo, de un rojo sangre brutal, en cuestión de segundo domino a Renata, sacando fuerzas de solo Dios sabe donde, sin mucha tardanza levanto a todos los vampiros enemigos en la diminuta sala, mientras con lo último que le queda de fuerza se elevaba del suelo, haciéndolos girar alrededor del cuarto al mismo tiempo que ella giraba sobre sí misma con brazos extendidos, era tal la rapidez con que lo hacía que no distinguíamos lo cuerpos solo las formas borrosas, en un momento ella dejo de girar y con una simple inclinación de cabeza los estrello contra las paredes haciendo sendos agujeros en cada parte donde chocaban, Emmet apagaba el fuego de las ropas de Edward, mientras los demás llegaban justo para ver como Bella en su último y aterrador acto acababa por salvarnos la vida una vez más, justo cuando se estrellaba el ultimo vampiro, se desplomo desde la altura donde se encontraba, no despertó… - termino Jasper esa parte tan escalofriante.
Decirlo era escalofriante, podía ver como Esme se estremecía de escucharlo, mis hermanas se habían encogido al verlo.
-Edward y Alice amortiguaron su caída, Emmet la tomo en brazo y corrimos de nuevo hacia la salida donde Melisa estaba despertando en la Hummer, entramos de prisa, y manejamos hasta llegar a la mansión, donde Nessie y Jacob nos esperaban. Al entrar Edward tomo a Bella y se perdió en el bosque, no teníamos idea de cómo o que hacer para que despertaran, solo se nos ocurrió hacer lo mismo que hicieras con Bella. Tres horas después cada uno tenía una serie de bolsas de sangre humana conectadas, todas robadas, saqueamos las casas de donaciones-continuo Jasper.
Ahora que todo habíamos contado una parte, entendía varias cosas que durante la batalla no vi, o a la que no preste atención y por los rostros de todos me daba cuenta que era igual para ellos.
Melisa relato de nuevo su historia y como ella era parte del engaño y cuando Aro revelo su plan entendimos que era solo una fachada para separarnos, mencionamos también al oráculo y su predicción, antes esto Carlisle tardo un momento en responder.
-Esto es algo que desconozco, no obstante por lo que escuche allí, Aro lo creía completamente, hay muchas leyendas que desconozco pero sé quién podrá ayudarnos a saber si esto es cierto, Bella debe conocer esto a la perfección si desea seguir con nosotros-
-Carlisle, Esme, ¿podrán perdonarme por este…?
-calla, Aro uso tu único error para su provecho y no somos quienes para juzgarte, arriesgaste tu vida al defendernos, creo que no hay nada más que decir sobre tu participación en este asunto- interrumpió Esme con todo el amor disponible en su corazón y que sin duda era mucho.
-¿Dónde esta Bella ahora?- pregunto de pronto, mirándonos a todos y finalmente a Carlisle.
-Bella sigue sin despertar cariño, está muy herida y no está funcionando la sangre, esta vez se necesitara algo mas- respondió nuestro padre al tiempo que lo mirábamos, - además hay otra cosa, por la que Edward la tiene en el bosque, lo entenderán cuando la vean-
Melisa pov.
Edward y Jacob habían salido mientras Esme hacia publico su perdón por mi comportamiento, para cuando pregunto por Bella y Carlisle contesto, los chicos traían a Bella en una camilla, nos quedamos de piedra al comprender que el olor de sangre fresca no era de las bolsas, provenía de Bella, de su vientre, las mujeres comprendimos la momento lo que le sucedía, los varones, bueno Emmet, Jasper, incluso Jacob, se miraban sin entender nada.
-¿Cómo puede sangrar?, hum, ¿porque está sangrando?- pregunto Emmet finalmente.
-Porqué tuvo un aborto Emmet, Bella estaba embarazada tal como Aro dijo, solo que las cuentas no eran correctas, Bella cumplió años al menos una semana atrás, no la encontramos a los 3 días como pensamos, la encontramos a los 5 a partir de que la mordieron y si mis cálculos son correctos su cumpleaños fue durante los días previos al evento- dijo mirando a Edward quien solo logro asentir.
Sabiendo que la vida que Bella perdía era parte de él también, otro hijo que nunca pensó que podría tener. La única vida que no se pudo salvar en la batalla pasada, la única con la que nadie contaba y de la que nadie sabía.
-entonces, la leyenda es cierta, Bella podrá tener hijos cada determinado tiempo...- dijo Alice dejándose caer en el sofá.
Nos miramos todos. Esto era… sin palabras.
‘Harry Potter’ vs. ‘Twilight’: Las Lecturas de Juventud y la Formación de la Identidad
‘Harry Potter’ vs. ‘Twilight’: Las Lecturas de Juventud y la Formación de la Identidad
“Harry Potter trata de confrontar los miedos, encontrar la fuerza interior y hacer lo correcto frente a la adversidad. Crepúsculo trata de lo importante que es tener un novio.”
Stephen King
El final de Harry Potter me ha despertado la afición por las maratones de sagas cinematográficas en casa. Ya he hecho maratones deStar Wars, El señor de los anillos, X-Men, El caso Bourne, Star Trek… y, el pasado fin de semana, opté por Scream.
Estaba viendo Scream 4 y, como no me estaba gustando demasiado la película, me puse ha meditar acerca las palabras de mi amigo Aarón, de dieciséis años, que había escrito en una red social una reflexión sobre lo que había significado Harry Potter en su vida: “Harry Potter me ha hecho ser como soy”. De forma parecida se expresaron muchos fans después del estreno de Las Reliquias II. “Gracias por enseñarme tanto, gracias por darme sueños por los que luchar”, escribió mi amiga Irene, también de dieciséis años. “Harry Potter ha cambiado mi vida, me ha proporcionado modelos de comportamiento”, me dijo en una ocasión mi amigo Pedro, de quince.
Por supuesto que, cuando eres adulto, también un libro o una película puede cambiar tu vida al proporcionarte otra manera de ver el mundo, pero las lecturas de la infancia y la adolescencia configuran tu identidad de manera más decisiva que las de cualquier otra etapa de la vida.
Andaba dándole vueltas a estas cosas, cuando me asaltó un terrible pensamiento. Me cogió por sorpresa y me aterrorizó como si el mismísimo asesino de Scream hubiese atravesado de un salto el cristal de la ventana de mi salón y se hubiese plantado ante mí con su túnica negra y su careta de ángel de la muerte, blandiendo un enorme y afilado cuchillo.
“¿Twilight también habrá hecho a sus lectores como son?”, me pregunté angustiada. Fue como si acabara de sonar mi teléfono y, al descolgar, la voz del asesino de Scream me hubiese preguntado: “¿Cuál es tu película de terror favorita?”. Intenté huir desesperadamente de ese pensamiento como las víctimas de la película que estaba viendo, que corrían despavoridas por la casa en busca de un escondite o una salida, pero, al igual que el psicópata disfrazado de la película, la pregunta saltaba sobre mí al abrir un armario o al entrar en una habitación oscura. Por eso decidí que lo mejor era enfrentarme a la idea que me torturaba y escribir este artículo.
Como suelo leer vuestros comentarios, tanto los de mis post como los de los post de mis compañeros, sé que a muchos no os gusta que se compare Harry Potter con Twilight. Por mucha razón que tengáis los que sostenéis que son dos historias muy diferentes en cuanto al argumento y a la calidad literaria, la maquinaria comparativa hace mucho tiempo que está en marcha y ya es imparable.
A la estrategia comercial de los editores de Twilight (“El libro que ha superado en ventas a Harry Potter”, rezaban las pegatinas) se sumó luego la productora cinematográfica, y a dicha estrategia también se adhirieron ciertos sectores de la opinión pública estadounidense a los que incomodaba el éxito de una autora británica en su territorio y que llevaban tiempo esperando que surgiera una saga autóctona que hiciera competencia a la extrajera. A estas personas nunca está de más recordarles que las buenas obras literarias no tienen ni patria ni bandera. Su patria es el mundo interior de cada lector y su bandera, la huella imborrable que dejan en el alma de los seres humanos.
En cualquier caso, esta estrategia comercial dio resultado. Es algo usual que Harry Potter y Twlight sean comparados como si fueran productos literarios y cinematográficos muy similares. Recientemente, en la entrega de premios de la MTV, al cantante Justin Bieber le preguntaron si era seguidor de Harry Potter o de Crepúsculo. Después de una profunda y sesuda reflexión, él respondió: “De ninguna de los dos… Bueno…, esto… Creo que de Twilight”. Y yo misma recuerdo haber sido preguntada al respecto en casi todas las entrevistas previas a la feria del libro más reciente. “¿Qué opina sobre la repercusión que han tenido en la literatura juvenil actual fenómenos como Harry Potter y Crepúsculo?”, me inquirieron una y otra vez. Hasta una periodista de una televisión local adornó el plató con un estante repleto de libros de la saga Crepúsculo que rodeaban amenazadoramente a los míos (casi me da un síncope cuando vi la estantería mientras me estaban colocando el micrófono).
Ante todo, quiero dejar claro que yo no desaconsejo la lectura de Twilight ni la de ningún libro. Leer nunca es perjudicial, lo que sí puede ser pernicioso es ir por la vida sin el más elemental sentido crítico. Algunos se preguntarán por qué me aterroriza que la lectura de los libros de Meyer pueda influir en la personalidad de sus lectores. Esta pregunta se irá respondiendo sola a lo largo del artículo. Ahora, la pregunta que debemos hacernos es otra: ¿por qué la mayoría de los seguidores de Twilight son mujeres?
Siempre que tengo ocasión, procuro conversar con alguna seguidora de Crepúsculo. Es difícil razonar con las muchachas que pierden la cabeza con un desnudo lobuno de cintura para arriba, pero, últimamente, he tenido la oportunidad de dialogar con mujeres más maduras, como la periodista que mencioné más arriba o una profesora de secundaria. El caso es que, aunque se expresen con más serenidad que las adolescentes, sus respuestas no son muy diferentes (“¡Oh, qué bonito!”, “¡Qué romántico!”).
Estas opiniones hicieron que se me encendiera una lucecita en el cerebro que alumbró las razones del éxito de la saga vampírica. Twilight es una novela rosa con protagonistas adolescentes (uno de ellos es centenario pero con aspecto y estilo de vida juveniles). Si buscáis “novela rosa” en Wikipedia, encontraréis que la saga Crepúsculo está catalogada como tal (aunque no es encuadrable exclusivamente en este género).
La novela rosa o novela sentimental (no confundir con novela romántica, que es la de la época del Romanticismo) se caracteriza, en líneas generales, por narrar historias de enamorados que tienen que superar adversidades hasta que, finalmente, triunfa el amor. Este género literario es tan digno como cualquier otro, y hay grandes obras literarias que se pueden clasificar en este epígrafe.
Estados Unidos es un gran consumidor de novela rosa, y muchas obras de este género suelen aparecer en sus listas de libros más vendidos. No es de extrañar, por tanto, el éxito de Twlight en USA. El perfil del lector de novela rosa estadounidense es el de una mujer de más de 20 años y con estudios superiores. Como Twilight tiene protagonistas adolescentes, consiguió enganchar a las lectoras habituales de novela rosa al tiempo que cautivaba a las más jóvenes.
Hay, sin embargo, algo que tiene que llamarnos la atención en cuanto al perfil de lectores de novela rosa en Estados Unidos (utilizo el ejemplo de este país porque allí se vende mucha novela rosa y hay bastantes estudios disponibles, pero los resultados son extrapolables a países de habla hispana): sólo el cinco por ciento de los lectores son varones.
Esto último me hace pensar en la creciente animadversión de los chicos hacia todo lo que tiene que ver con Twilight. Aún recuerdo lo que pasó en un cine de mi localidad cuando proyectaron el tráiler de Amanecer I antes del primer pase de Las Reliquias II. Cada vez que aparecían en la pantalla Edward o Jacob, unos muchachos, poniendo voz de pito e imitando a las chicas, gritaban “guapetón”, “tío bueno” y otros piropos.
“¿Celos?”, me pregunté, pero abandoné rápidamente esta idea. Muchas chicas gritan como posesas a las puertas de los estadios cuando ven a Íker Casillas, Piqué o Leo Messi, y yo no veo que a los chicos dejen de gustarles estos deportistas por eso. En la misma proyección de Las Reliquias II que antes he mencionado, se escuchaban profundos suspiros cuando aparecían en la pantalla primeros planos de Dan o Rupert, y tampoco me pareció que esto le importara a los chicos.
¿Por qué ese desafecto de los muchachos hacia los personajes de Meyer, entonces? Pues por el mismo motivo por el que la novela rosa tiene sólo un cinco por ciento de lectores varones. Los hombres dan la espalda a Twilight y a la novela rosa en general porque este género tiende a reproducir personajes masculinos estereotipados que se parecen muy poco a los muchachos de la vida real. Los protagonistas masculinos de la novela rosa no son como los chicos de verdad, sino como a las mujeres les gustaría que fueran (si hay alguna seguidora de Twilight que está a punto de tirar el ordenador por la ventana para no seguir leyendo mi artículo, le pido por favor que continúe, porque puede necesitar reflexionar serenamente acerca de esta cuestión).
Los muchachos han ido pasando de la indiferencia a la hostilidad abierta hacia Edward y Jacob porque les irrita que las chicas se derritan por hombres con los que no pueden identificarse y a los que no aspiraran a parecerse. Sin embargo, a los chicos no les molesta que las mujeres suspiren por los deportistas a los que me acabo de referir o por personajes de ficción como Harry, Ron o Neville porque todos ellos sí representan modelos de masculinidad adecuados.
Podríamos decir que leer novelas rosa es algo así como tomar un helado de chocolate. Es una experiencia placentera y agradable que no amplía nuestro conocimiento de la vida o del ser humano. El problema es que quien saborea un helado de chocolate sabe que el helado no va a ampliar su conocimiento del mundo, pero las lectoras de novela rosa no siempre tienen claro este punto. “Harry Potter es una fantasía para niños, sin embargo,Crepúsculo habla sobre cosas que le pueden ocurrir a cualquiera”, leí una vez en una página de fans de Twilight. Y eso es precisamente lo que me preocupa, lo que me asusta, que las lectoras de Twilight confundan realidad con fantasía y que lo hagan en un momento de sus vidas en el que se está formando su personalidad.
En los libros de Harry Potter, con todas sus lechuzas mensajeras, con sus chorros de chispitas saliendo de varitas y con sus vuelos en escobas o dragones, encontramos más realidad que si juntáramos el noventa y cinco por ciento de las novelas rosa que se han escrito en toda la historia. Los personajes de Rowling se enfrentan a los mismos conflictos a los que se ha enfrentado el ser humano desde el principio de los tiempos, y sus protagonistas son tan auténticos que uno tiene la sensación de que va a tropezarse con cualquiera de ellos a la vuelta de la esquina. La saga contiene un sistema de valores que podría hacer del mundo un lugar mejor. Por eso me reconforta que una generación entera haya desarrollado su identidad mientras leía estos libros, todo lo contrario de lo que me ocurre con la saga de Meyer. No voy a extenderme en esta cuestión porque ya he comparado personajes y relaciones sentimentales de las dos sagas en otros artículos (Los antecedentes literarios de Harry Potter VIII y Escenas eliminadas I: “Nosostros no vendemos sexo como Crepúsculo”) que os invito a leer.
Para apoyar mis argumentos sobre la novela rosa, os pondré como ejemplo las declaraciones de la escritora alemana Sarah Lark, autora de la obra En el país de la nube blanca (una novela sentimental de ambientación histórica) que comentó lo siguiente con motivo de la reciente publicación de su libro en español: “No estoy enamorada, soy demasiado romántica para tener novio, los verdaderos príncipes están en los personajes masculinos de mis novelas”.
Creo que hay que agradecerle a esta autora que sea sincera consigo misma y con sus lectoras. No le gustan los hombres que conoce y prefiere inventarse otros con los que puedan fantasear sus lectoras. Vaya por delante mi respeto hacia todas las formas de entender la creación literaria y la lectura, pero yo pienso que merece más la pena esforzarse en escribir y leer historias que nos ayuden a conocer, entender y aceptar a los chicos tal y como son en lugar de perderse en ensoñaciones fantasiosas sobre cómo nos gustaría que fueran.
Bueno, y después de dar un tirón de orejas a las mujeres…, no creáis que vosotros os vais a librar, chicos. Cuando hay un conflicto, es muy raro que la culpa sea sólo de una de las partes. A ver, millones de mujeres suspiran embelesadas en vuestras narices por un hombre que no existe, Edward Cullen, un tipo con más de cien años y con modales e ideas de otra época… ¿No estaréis haciendo algo mal, muchachos?
A veces pienso que el neomachismo hace pagar algunos tributos a las mujeres a cambio de la igualdad de derechos y oportunidades. Uno de esos tributos es la extinción de la caballerosidad masculina. La devoción femenina por Edward Cullen expresa, en parte, una añoranza de los modales caballerosos de antaño.
En España, por ejemplo, los avances en materia de igualdad de género han sido tan rápidos que algunos individuos han hecho mal la digestión de tanto cambio y castigan a las mujeres comportándose con ellas como auténticos cavernícolas. Y las mujeres podemos querer la igualdad, pero no nos agrada que, al intentar subir a un ascensor, los hombres nos arrollen pasando por delante de nosotras tan rápido como una manada de rinocerontes en estampida. Hay que decir, en descargo de la condición masculina, que hay mujeres (seguramente influidas inconscientemente por el neomachismo) que se molestan si un hombre les cede el paso, les abre la puerta o les retira la silla.
En nuestras sociedades está muy extendida la costumbre de echarle la culpa de todo a la juventud (“No tienen valores”, “No tienen cultura del esfuerzo”, bla-bla-bla, bla-bla-bla…), pero yo tengo muy claro que el último que se incorpora a la sociedad no puede ser el causante de los problemas. De hecho, he observado que existe una inclinación natural hacia la caballerosidad entre los jóvenes que se va perdiendo al imitar los malos ejemplos de los mayores, de las generaciones a las que la igualdad de género se les ha indigestado. El otro día le pedí por favor a un chico de unos quince años (lleno de piercings, de pelo largo y con una camiseta del grupo Guns and Roses) que me cediera su turno para utilizar la conexión Wi-Fi de la biblioteca porque yo tenía mucha prisa, y me dijo: “Por supuesto, yo soy un caballero”.
También he podido observar que los chicos latinoamericanos que viven en España son más educados y caballerosos que los españoles. Así que, muchachos de Latinoamérica, no imitéis a esos patanes cavernícolas españoles que circulan por ahí y, chicos españoles, no imitéis a los borricos de vuestros mayores. Resucitad la caballerosidad que ellos enterraron.
En el universo narrativo de Harry Potter encontramos que el mundo de los magos ha evolucionado de manera paralela al de los muggles pero con usos y costumbres en cuanto a vestuario y comportamiento algo diferentes. El mundo mágico de Rowling conjuga los ideales contemporáneos de igualdad de género (ni siquiera Lord Voldemort piensa que las brujas están menos capacitadas que los magos) con unos modales educados que nos recuerdan a tiempos pasados. Paradigma de este comportamiento educado, caballeroso y refinado sería Dumbledore, que hasta le cedió la palabra a Dolores Umbridge cuando ésta interrumpió su discurso carraspeando (en realidad, lo que se merecía era que alguien la agarrara por los pelos y la ahogara en un tanque de zumo de calabaza).
Para desbancar a Cullen del primer puesto de la lista de hombres más deseados y colocaros a vosotros, los muchachos de verdad, también os recomiendo que vuestra novia no tenga que llevaros arrastrando al cine a ver una comedia o drama sentimental. Aunque haya mucha novela y cine romántico de poca calidad, los prejuicios pueden escamotearos el disfrute de muchos libros y películas que merecen la pena.
A los que les pase como a mí, que se me están acabando las temáticas para hacer maratones caseros de películas, os sugiero que hagáis una maratón de películas protagonizadas por actores del elenco de Harry Potter. Un buen comienzo puede ser Sense and Sensibility, adaptación de una novela del mismo título de Jane Austen, autora muy admirada por J. K. Rowling y cuyo estilo irónico ha influido mucho en nuestra autora favorita. Sense and Sensibility (Juicio y sentimiento en América Latina y Sentido y Sensibilidad en España) cuenta en su reparto con el grandísimo Alan Rickman (hay una escena en la que carga en brazos con Kate Winslet y que a mí me recuerda a Snape abrazando a Lily), con Emma Thompson (profesora Trelawney), con Imelda Staunton (Dolores Umbridge), que aquí es una simpática señora casada con el doctor House (más doctor House que nunca, y eso que todavía no había hecho la serie) y con Gemma Jones (Madame Pomfrey). Y, como detalle premonitorio de que parte del reparto de esta película acabaría trabajando en la saga más exitosa de todos los tiempos, hay un personaje que tiene un loro que se llama Potter (esto no está en el libro, así que el guionista debe ser un pariente muggle de la profesora Trelawney).
Con este artículo no he pretendido aconsejaros, sino invitaros a reflexionar. Sí deben ser seguidas al pie de la letra las palabras de un viejo, sabio y barbudo director de colegio que dijo una vez: “¡Bienvenidos a un año nuevo en Hogwarts! Antes de empezar nuestro banquete, quiero deciros unas pocas palabras. Y aquí están. ¡Papanatas! ¡Llorones! ¡Baratija! ¡Pellizco!… Muchas gracias”:
Nos seguimos leyendo…