Entre dos tierras

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Capitulo 11.- “Las Cullen”

Edward pov

Salí enfado de la cafetería apenas sentí a Jasper y Bella manipulando mi humor, no quería estar calmado, quería poder estar enfadado con ella, era lo único que me detenía de tomarla y llevarla al bosque, aún contra su voluntad y hacer mía de una vez por todas, así le dejaría claro que me pertenecía solo a mí y por fin dejaría de andar con otros hombres, cuando no era Greg era cualquier otro del dichoso club y ahora el tal Ty… y lo peor era que Alice y Rosalie la apoyaban.

¿En qué carajo pensaban?...

¿En qué carajo pensaba yo? ¿Llevarla al bosque en contra de sus deseos? ¿Forzarla? ¿En su primera vez… o en cualquier otra? Carajo, estoy perdiendo la cabeza. Aunque con sus habilidades seguramente la peor parte la llevaría yo.

Jueves, hora del club, Greg se acerco sonriente, con la manos extendidas para abrazarla, como siempre lo hizo por más tiempo del normal, maldita Bella que lo dejaba, yo ni siquiera podía tocarla.

Carajo.

-¿cuándo y adonde paso por tu H3?- pregunto en tono triunfal el tipejo.

-¡¡¡lo conseguiste!!!- exclamo la razón de mi tortura.

-te dije que por tu auto vendía mi alma- contesto sonriendo enormemente, mientras Bella se le tiraba prácticamente encima al abrazarlo –y no solo te conseguí eso- dijo al tiempo que le abrazaba -recuerdas que tus hermanas, las chicas del club y tu estuvieron pidiendo ritmos nuevos, mas caribeños, bueno conseguí a un instructor de baile que se especializa en samba, salsa, Capoeira y empezamos hoy, así que como vez, me gane la gasolina- finalizó riendo y lleno de satisfacción al sentir los labios de Bella sobre los suyos.

-gracias, es más de lo que esperaba conseguir, mañana después de clases te llevas el auto, los papeles del seguro están en la guantera, solo te pido lo cuides, ese bebe es todo para mí- respondió apenas dejo sus labios.

-déjala en paz Edward, es libre ¿recuerdas? – siseó Rosalie junto a mi oído.

La mire aturdido.

-“lo sé todo, Bella nos lo dijo después que te fueras la semana pasada, piensa que la odias por lo que te dijo al final y prefiere que sea así, ha llorado mucho por ti, déjala, necesita ser feliz y no será contigo mientras no arregles tu situación, te pido por favor que la dejes buscar lo que le hace sentir bien y esto le ayuda”, pensó, mientras Alice pensaba algo similar.

Bella llorando por mí, ¿llorando? ¿Desde cuándo los vampiros lloraban?

-“Dios si así se siente con ropa, como será sin ella”- el imbécil de Greg pensaba mientras Bella lo abrazaba.

Deje que ella entrara en mi mente y registrara el pensamiento, se aparto al momento mirándome, segundos después estrello sus labios sobre los de imbécil de nuevo.

-“¿qué demonios haces?, Bella, si tanto te urge te llevo al bosque y lo hacemos de una vez”-pregunte mirándola, sostuvo mi mirada un momento mientras reflejaba dolor.

Genial la había ofendido y lastimado, todo sin abrir la boca, bajo la mirada avergonzada. Carajo, el imbécil soy yo.

-es hora del club –dijo Alice rápidamente -Vamos chicas- mientras jalaba a Bella quien estaba seria, completamente.

Rosalie, que me atravesaba con la mirada, me habría arrancado la cabeza de haber tenido oportunidad, hasta Jasper quien nunca juzgaba me miraba raro y Emmet, hum, Emmet…

-“te aplastare esa bronceada cabeza, idiota ¿qué le hiciste ahora a la enana?”-

Sí, todos se habían dado cuenta de nuestro intercambio mental y de como ella se había replegado sin decir nada más. Al menos todos los vampiros.

-váyanse al carajo- exclame en voz perfectamente audible, mientras miraba a otro lado.

-hum, será una tarde interesante, oye Emmet, ¿y si vamos al gimnasio?, quiero ver que aprende de nuevo tu hermana, lo último fue muy excitante...-

-hey, estás hablando de mi hermana, aunque te diré que esa vuelta que Rosalie hace es muy provocativa…-

-hey estás hablando de mi hermana- interrumpió Jasper mientras se reían de lo enredado que resultaba todo.

-imbéciles, ambas son sus hermanas- termine diciendo fastidiado de sus bromas.

-hum, tarde larga, vámonos Jasper, ya regreso el Edward reprimido, parece adolescente con síndrome menstrual- dijo Emmet mientras se botaba de la risa y Jasper junto a él, dirigiéndose al gimnasio.

Bien mejor estar solo que mal acompañado.

Me dirigí a la salida, tome mi auto y me marche, a casa, solo, como antes.

Carajo.

Emmet pvo

Entramos al gimnasio, algunos estudiantes estaban sentados en las gradas mirando a los chicos bailar, eran más hombre que mujeres por lo que varios estaban sentados en el suelo esperando su turno para ensayar, las más cotizadas eran sin duda nuestras chicas, eran quienes marcaban los movimientos, estaba situadas al frente para que la demás pudieran ver como se hacía, mi Rosalie se veía hermosa enfundada en el conjunto deportivo rojo que traía, no podía dejar de ver sus caderas, sus senos, toda ella me intoxicaba, era la mujer más hermosa, claro mis hermanas también lo eran, pero eran eso precisamente, mis hermanas, Rosalie nunca lo había sido, desde el primer minuto fue mi mujer, mía y solo mía, Edward nunca la miró de esa forma, a pesar que Carlisle y Esme pensaban que serían una buena pareja.

Gracias a Dios no fue así.

Mire a Jasper, tenía esa cara de imbécil que le aparecía cuando veía a Alice, se amaban desde hacia tanto, más tiempo de lo que teníamos Rosalie y yo, cuando se integraron a la familia ya eran pareja, nadie sabía la edad de cada uno con exactitud, así que decidimos tomarlas a partir de que llegaron a la familia y ellos lo aceptaron así, tratando de olvidar sus pasados.

Eran los mejores hermanos que pudiera pedir, Melisa, Vanessa incluso el perro, eran parte de ella también y los quería igual, aunque Melisa me gustaba por hacer feliz a Edward ahora no sabía con exactitud cómo me sentía respecto a ella.

Bella definitivamente se había llevado mi corazón, verla llorando esa noche y de esa manera, por todo y nada fue como una espada atravesándome… no entendía que le pasaba, solo sé que verla tan triste, desconsolada, me dejo clavado en mi sitio, dándole espacio para sacar su dolor y luchando por no correr hasta ella y abrazarla, rompería la crista de quien la hiciera llorar de nuevo de esa manera, aun si el responsable era el imbécil de mi hermano “mayor”.

Cuando no pude soportar más, la abrace, la lleve en mi espalda mientras reía como una niña pequeña y desde ese momento fue MI niña pequeña, MI enana. Dios como la quería, mi hermanita. La defendería de todo, incluso de Edward. Idiota, hacerla sufrir así por sus estupideces.

La clase estaba por la mitad, mis chicas seguían bailando con cada chico de los que esperaban su turno, les indicaban como moverse, como tocar a la compañera, el ritmo, los movimientos separados, etc. Cuando la instrucción terminaba cada una regresaba con su pareja oficial de baile, Alice estaba con Greg, quien babeaba por Bella, mi chica con un tipo casi tan grande como yo, pero no tan guapo según mi Rosalie, Bella estaba con el tan nombrado Ty, quien la miraba tratando de decidir si era un fantasma o no.

No lo era, pero lo que sí era no podía saberlo. Bella le miraba con ternura, casi amor, algo había entre ellos y debía averiguarlo, Rosalie me lo diría, aunque tuviera que usar tácticas bajas de persuasión.

Hum, esposas de titanio, eso usaría…

Jasper pvo

Mire a Emmet, con la mirada de estúpido mientras Rosalie bailaba con otro tipo, seguramente estaba pensando en ella, siempre lo hacía cuando Rose se alejaba un poco, se amaban tanto como Alice y yo, ni siquiera recuerdo ya como me tope con este Ángel, pero si sé que no la encontré, ella lo hizo, me reclamo por tardar tanto, típico de mi duende.

Arreglo el desastre que era mi vida, me dio una razón para seguir, me prometió una vida sin remordimientos por quitar las vidas de humanos para mantener la mía, me prometió una familia, con personas que nos amarían como su fueran nuestros padres y hermanos con los cuales compartir esta existencia, no incluía la mascota de la familia pero incluso a Jacob a le tenía afecto, a Melisa después de casi convertirla en la cena le tome mucho cariño, era una hermana mas, pero ¿cómo elegir ahora entre mi amor por Melisa y todo lo que Bella me hace sentir? era imposible resistirse a su encanto, la manera en cómo te miraba con toda la inocencia de quién no ha visto aun los horrores de esta vida.

A Bella no le había tocado pelear con neófitos, vampiros, Vulturis, no había maldad en su alma, porque era buena en su vida de humana, era una chica llena de vida, con intereses sociales, desenvuelta, sociable por naturaleza y su enfermedad solo había opacado eso, su conversión la hizo una versión mejorada de sí misma.

Bella era el aire fresco que nos revitalizaba a todos, desde su llegada las noches eran interesantes, había juegos y bromas, se había ganado a Emmet en tiempo record y qué decir de Rosalie, platicaban por horas, cuando no platicaba con Alice o peor… cuando se juntaban las tres, esa noche Emmet y yo nos quedábamos solos, como Edward.

A quien el amor por Bella y por Melisa lo tenían dividido y en constante tensión.

Era difícil para todos tomar una posición acerca de este triangulo amoroso, por que los involucrados eran familia y los amábamos a todos mucho, sabíamos que una de ellas resultaría herida y eso nos lastimaba, pero también entendíamos que Edward necesitaba hacer la elección antes de que los tres salieran mas heridos, bueno Melisa aún no sabía nada pero seguramente se vería afectada si Edward escogía a Bella. Después de todo, lo que Bella no había vivido, Melisa sí.

Mi mujer bailaba ahora con Greg, por fortuna no tenía nada que temer, el humano se caía de la baba por Bella, Edward lo pasaría realmente mal si viniera, no leía los pensamientos pero podía sentir el nivel de excitación y expectación que “Las Cullen” causaban, después de todo estaban bailando salsa, un baile caliente por naturaleza, esos movimiento me darían gran placer esta noche, Alice siempre practicaba conmigo en la privacidad de nuestro dormitorio.

Gracias a Dios por el club de Baile.

El baile siguió por 3 horas más, nadie quería irse cuando las Cullen bailaban, así que el club que era de 3 horas originalmente se hacía ahora de 5, era bueno, los chicos se quedan en la universidad y no andaban vagueando. O al menos eso decía el instructor del club, quien estaba encantado de que sus alumnas estrellas fueran incansables cuando de instruir se trataba, se dividían en grupos, cada chica tomaba un grupo de 6 personas, hombre y mujer y 2 varones sin pareja, les enseñaban los pasos y practicaban con los solitarios. Así el grupo avanzaba parejo, todos aprendían y cada día se hacía más grande el club.

-quizá deberíamos entrar, piénsalo, tendríamos la oportunidad de bailar con las chicas y de ser la envidia de los humanos - siseo Emmet.

-sí, quizá es buena idea, al menos así la mayoría de los hombre sabrían que Alice y Rosalie están apartadas, le dejamos el problema a Edward- dije sin poder aguantar la risa.

-sí, me parece bien, mañana nos apuntamos- dijo Emmet caminando hacia Rosalie, pues la clase había terminado.

-¿nos vamos chicas?- pregunte cuando el lugar se vació.

-¿y Edward?- pregunto Rosalie cuando al salir no vimos su auto.

-se marcho hace horas, no andaba muy feliz- dije mientras sentía la tensión de Bella.

Fue la única que fingió no escuchar, como si eso fuera posible.

Por fin llegamos a casa y estaba vacía. No había rastros de Edward. Mire un momento a Bella.

Su rostro estaba imperturbable, pero sus emociones eran otra cosa.

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Aki esta el capitulo mis niñas, por fin el blog me deja hacer mi trabajo.

con amor Alejandra Rivas ; )