Capitulo 8, Desde tus ojos

By: Hery

Sumary: Bella es una mujer de 32 años divorciada, que se ve obligada alejarse de todo, su familia, sus amigos, su país, su carrera, se exilia en una hacienda y se entrega a las letras, la fantasía, los sueños; una mujer que se llena de dudas, inseguridades, soledad y donde solo las heroínas de sus cuentos son capaces de ser hermosas y valientes.

Un día después de su cumpleaños número treinta y dos; frustrada por un bloqueo que le impide continuar escribiendo, se despierta y llevada por una fuerza inexplicable hace reservaciones para un viaje a los Ángeles, California; así toma la decisión de enfrentarse a sus miedos y darle la cara a la vida, donde el destino la llevara a encontrarse con nuevas situaciones, emociones y un joven y famoso actor, que le hace cuestionar lo que ha sido su vida hasta ahora.

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Desde tus ojos

Coke

Una vez dejamos de hablar me dormí; creo que realmente estaba agotado.

Cuando me desperté lo primero que hice fue pensar en Stars y en organizar mentalmente todo un día de citas con ella, como si yo en realidad la fuese a llevar, y quisiera impresionarla, lo hice durante la ducha, durante el desayuno e inicie a escribir desde que me Subí a la sub que nos llevaba al set.

Las primeras escenas no eran conmigo, así que tenía una hora o quizás más para seguir organizando todo el día, una vez lo tuve todo, comencé a hacer unas llamadas al otro lado del océano Atlántico.

Me llamaron a grabación a eso de las 10am, grabé hasta el receso del lunch a la 1 pm, aproveche en enviar todo el itinerario a su Msn BB pensando en que serian las 7 am allá, pidiéndole que llevara el horario lo más cerca posible de lo que le había escrito, que era muy importante para mí.

Stars see

Me duche y vestí con un pantalón corto de cuadros rosa y amarillo, un top blanco de tiras, unas sandalias bajas color amarillo y su bolso a juego, coleta en el cabello y lentes oscuros.

Inicie mi día tomando el coche y yendo a una cafetería de barrio, Cofee Fever, al llegar hice exactamente lo que me había pedido, cierra los ojos y escucha, huele y déjate llevar, ordene un muffin de chispas de chocolate y un cappuccino con doble canela y crema, según su pedido.

Escuche la brisa, los pájaros, las hojas de los arboles, olí el café recién hecho, menta, chocolate, miel, caramelo y el olor del sol en mi piel, sentí que los vellos de mi nuca se erizaban con todos esos olores y sensaciones, algo que el describió como una electricidad recorriendo tus sentidos, teletransportandote a tu niñez.

Me dijo, espera a las 9 y 30 entraran una pareja de ancianos, salúdalos son Grace y Miles, llevan 50 años casados y se conocieron en el parque que esta en frente, en la fuente, pídeles sentarte con ellos y que te cuenten su historia, espéralos y ve al parque con ellos, tomate una fotografía junto a la fuente donde se dieron su primer beso.

Da una vuelta al parque y toma las fotografías que te guste, a las 11 y 30, ve a the magic box.

Era una hermosa librería, escondida en un área muy comercial, pero secreta si no conocías de su existencia, al entrar te trasportabas a una casa campestre, sus anaqueles eran de madera rustica, sus muebles eran butacas grandes con telas de cuadros y tenía una  alfombra color oliva, había grandes lámparas tipo araña colgando de su techo, una enorme chimenea en lo que asemejaba ser un estudio de una gran hacienda campestre. Al fondo estaba una pequeña barra y unas mesas donde podías desayunar o merendar lo que quisieras.

Esta librería tiene una particularidad, si eres cliente habitual, puedes leer los libros disponibles sin tener que comprarlos, debes tener tiempo para hacerlo y ser un adicto a la lectura, yo se que prometimos no decirnos nuestros nombres, si tu quieres no me des el tuyo, pero quiero que este día sea muy especial, ves al hombre detrás de la barra de la caja; acércate a el se llama Joseph dile que Anthony te envió, el sabrá que hacer. Por cierto ese es mi segundo nombre, nadie lo conoce, así que técnicamente no he quebrantado ninguna promesa.

Me acerque al Señor, le dije que Anthony me había enviado, inmediatamente me llevo atrás de los últimos anaqueles del fondo, apareció ante mi, una hermosa sala de lectura con bellos sillones floreados en distintos tonos de color durazno y tierras, una chimenea mas pequeña, y un delicioso olor a canela y libros nuevos inundaba todo el espacio, me ofreció uno de los sillones, me dijo que esperara y se fue, pasados unos minutos regreso con un libro que dejo en mis manos y una bandeja que deposito en una pequeña mesa al lado mío, en ella había una coca-cola light y un rollo de canela. Joseph me dijo que abriera el libro donde estaba el separador y leyera.

Era un libro de poemas de varios autores independientes, tenía cuatro separadores, así que los abrí uno a uno, como me dijo que hiciera

Mariposa de menta.

Como un fantasma y sin avisar

Así fue como irrumpiste en mi vida

Buscaste en mi cabeza un altar

Y no puedo llamarte atrevida

Ya que si estás en este momento dentro de mi cabeza

Es porque de mi vida no tengo la certeza.

Ahora que vives en mi, permíteme decirte

Que las estrellas me dijeron que tú eras especial

Que te cuide y trate de no herirte

Que trate de ser menos hombre y más sentimental

Pues eres para mí una niña muy contenta

Por eso te llamaré mi mariposa de menta.

Reina de mi vida que habitas en mi corazón

Robaste toda calma y me dejas grato sabor

Y si ya me perdiste mi alma y mi razón

Si supieras la locura inmensa que me aletarga

Verás que mis deseos te consagran.

Dugesia solitaria que buscas un descanso

En mis brazos el calor que añoras se aposenta

Ahí se resguarda todo verso que te lanzo

Mi niña duérmete aquí mi mariposa de menta

Y si el andar que persigues tiene rumbo desconocido

Toma mi mano que eres lo mejor que he conocido.

Mi psique celestial mejor que la Diosa Venus

Tu belleza solo se admira si tus ojos me lo permiten

Por que si te miro por mirar tu encanto se hace menos

Solo así tus brazos se abrirán y me dirán que me admiten

Mi mariposa de menta que vives solamente en mí

Psiquey

Boceto

En mi mente hay un boceto de ti,

en blanco y negro, y sonríe,

y el viento toca su cara,

y su sonrisa es cada momento más hermosa.

En mi mente hay un boceto de ti,

tiene colores de tu piel y tus labios,

y su cabello no tiene orden,

y sus labios dicen te quiero.

En mi mente hay un boceto de ti,

tiene lunares en los dedos

y tiene pecas sobre la nariz,

y un lunar al lado del ombligo.

En mi mente hay un boceto de ti,

y tiene vida y tus movimientos,

y vuela hacia mi,

y quisiera que fueras tú.

Mi mente ya está vacía,

el boceto ya tiene vida fuera de mi,

me saluda con besos de agua

y respira de mi cuello.

Issie.

Te me acercas

      contándome al oído milagros

      de miles de leyendas

      que quedaron entre tus aguas.

 

      Me salpicas

      con espumas inundadas de misterios

      de otros tiempos y distancias,

      con lamentos de promesas

      que perdieron sus palabras

      en tus bajamares intensos...

 

      Y yo me acerco y te salpico

      sabiéndome tan pequeño,

      tan desconsoladamente chico,

      tan solo entre mis gentes cotidianas,

      que me apabullan tus mareas,

      tus olas y tus resacas.

 

      A veces me respondes...

      Pero de continuo callas y resbalas

      en las arenas de mi playa

      que esperan impacientes tus respuestas

   

solsticio.

Cuando el sol

      acaricia el horizonte de tu cuerpo

      y la brisa se esconde

      a dormir en la penumbra de las dunas,

      poco antes de que lo oscuro

      te acune y te proteja,

      en el mágico intervalo de minutos

      en que el día se viste

      con el negro hondo de la noche,

      entonces, mi mar, entonces,

      me sobran las palabras

      y me hago de espuma y de salitre...

 

      Entonces,

      tus murmullos monocordes y constantes

      son todo lo que quiero y lo que mamo:

      y sé que soy,

      y sé que siento,

      y sé que vivo

      en un maridaje secreto y relajado

      con historias de marinos y de peces

      que juntan magia en tus orillas.

 

      Entonces,

      desde esta orilla que me dieron

      con fortuna y sin angustias,

      dejo llorar los sentimientos

      que me hermanan con el mundo

      impotente y revanchista,

      plácido y rencoroso,

      ofendido,

      soñador,

      esperanzado...

maryluna

Los leí varias veces, eran hermosos, estaban cargados de sentimientos que se sentían a través de las paginas, me llenaron de energía y melancolía, imagine mi mar, el de playa caracol y los cientos de atardeceres que había visto llegar desde mi balcón o cabalgando a mi luna o mi sol.

Este hombre estaba llenando mis sentidos, olfato, vista, gusto, oído y estaba añorando su tacto, alguien capaz de hacer sentir sin siquiera poderlo ver, ni oír era algo que en mi disco duro no tenia definición, era  simplemente irreal, solo en fabulas existían.

Mi lunch, también fue ordenado por él, eligió un restaurante griego, cerca a la librería nada ostentoso y muy acogedor, escogió para mi The Greek Paradise una ensalada con trozos de pollos, camarones  y varios setos secos y frutas, con una copa de vino blanco; totalmente delicioso, una explosión de sabores y cosquillas en el paladar, casi como un primer beso.

Mire el reloj ya eran las 4 y 30, si quería llegar a Pacific Park debía salir ya como dijo, así que pedí mi cuenta y me dijeron que ya estaba paga, que un caballero del otro lado del atlántico la había cancelado. Sonreí, al pensar todo el trabajo que se había tomado y a qué hora había planeado para mí todo esto y por que tomarse tantas molestias, solo por mí, alguien que no conocía y que no había visto ni una sola vez. Al levantarme un mesero se acerco a mí y me entrego un girasol, me dijo que en Pacific Park me acercara al final del muelle a la hora del atardecer y que no olvidara llevar el girasol. Le di las gracias y Salí disparada a buscar el coche, llena de una emoción indescriptible.

Llegue faltando 5 minutos para las 5 y 30, aparque y como si alguien estuviera esperando por mi, corrí para cumplir con mi cita, llegue al final del muelle, el color rosa, naranja y azul se mezclaban en ese hermoso cielo, en espera del crepúsculo, los últimos rayos solares se negaban a dejarse ir en el infinito horizonte y calentaban mi rostro, acariciándolo junto a la brisa salada del océano pacifico, el canto de las gaviotas diciendo adiós a otro día, las risas de niños y adultos en las atracciones del parque y las notas de un jazz proveniente de un saxofón detrás de mi, eran el cierre de mi día a través de sus ojos, cerré los míos sintiendo su abrazo en mi cintura y su aliento en mi oído mientras me decía: Me encanto pasar el día contigo.

_¿Usted es Stars see? _escuche a mi lado, haciéndome salir de mi fantasía

_Si. _solo eso pude decir

_Esto es para Usted._

Me entregaron una caja azul, adornada con estrellas de mar y caracoles y una pequeña tarjeta que decía.

No te pierdas este atardecer y no me lo hagas perder a mi, quiero  una fotografía tuya en el, que sea solo para mi.

Anthony.

Pd. No lo abras todavía.

Pedí el favor me tomaran su fotografía, mire el atardecer hasta que el sol se rindió ante el horizonte y encendieron las luces del muelle.

La última parte de su itinerario me decía que comprara un algodón de azúcar, me sentara en una banca cerca al malecón de entrada al parque y esperara 30 minutos.

Pasados 20 minutos llego un mensaje al BB, me demore al encontrarlo, busque la aplicación.

_Ábrelo ahora _decía sin mas

Tome la caja con mucho cuidado, quería mantenerla tal cual sin daño alguno, dentro estaba llena de papeles blancos azules y pequeños tules, como asemejando las olas del mar, comencé a buscar en el fondo y sentí algo firme como un estuche o caja metálica pequeña, lo saque con cuidado y era un Iphone 4 inmediatamente Leave out all the rest de Linking Park lleno el momento, mire la pantalla y decía Anthony llamando.

Me asusto, no sabía si responder, que iba a decir, como sería su voz, la niña que estaba a mi lado me miro llena de inocencia y le dijo a su mama, “mami el móvil de la señora está sonando”, eso me saco de la nebulosa en la que estaba y acepte la llamada.

_Hola _conteste

_Hola _me respondieron, su voz era profunda y suave a la vez.

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Haayyy... quiero que alguien me haga pasar un día así!!!  ¿qué dicen?... dejen sus palabras para este hermoso fic! gracias!